Empiezan los trabajos de cobertura parcial de la Gran Via en la salida hacia el Maresme

Las obras de semicobertura de la Gran Via de Barcelona entre la rambla del Poblenou y la calle de Extremadura, en Sant Martí, empezarán hoy a las 22.00 horas y está previsto que terminen dentro de dos años. Ésta es una de las vías principales de entrada y salida de la ciudad hacia el Maresme por lo que los trabajos tendrán un efecto notable sobre el tráfico. Mientras duren las obras no se podrá circular a más de 50 kilómetros por hora en la zona y se reducirá en medio metro la anchura de cada uno de los tres carriles que tiene cada sentido de la marcha.

Durante la primera fase de los trabajos, que finalizarán en octubre de este año, sólo se verá afectado el tráfico del tronco central de la Gran Via. Los tres carriles de cada calzada se desplazarán hacia los lados para que se pueda construir la nueva mediana en el centro, las cimentaciones de las pasarelas, el puente de Espronceda y las instalaciones de luz, riego y jardinería.

Una vez finalizados estos trabajos, se desplazará la circulación de vehículos hacia la parte central y se construirán los muros y los voladizos en las calzadas laterales. Éstas obras las llevará a cabo la Generalitat, que junto con el Ayuntamiento, financian a partes iguales los 79 millones de euros que costará el proyecto. El Consistorio, además, se ha encargado de los trabajos entre la plaza de las Glòries y la rambla del Poblenou y también asumirá la urbanización de la superficie y la prolongación de la rambla de Prim.

La semicobertura de esta vía tiene como objetivo reducir la contaminación acústica, mejorar las conexiones de un barrio que hasta ahora ha estado dividido por la Gran Via, crear más zonas verdes y mejorar el transporte público de la zona. La Generalitat se encargará de las obras de construcción de la estructura del tranvía que unirá Glòries y Sant Adrià y que pasará por debajo del voladizo del lado de mar. En el lado de montaña se construirá un aparcamiento de 750 plazas.

Una vez instaladas las pantallas acústicas en los laterales y en el tronco central de la calzada, está previsto que el nivel de sonido pase de 77,5 decibelios a 63,7. Con la semicobertura también se ganará un paseo de dos kilómetros y se creará un espacio verde de 135.000 metros cuadrados. La conexión entre un lado y otro de la vía mejorará con la construcción de pasarelas para peatones cada 130 metros.

Presión vecinal

La cobertura parcial de este tramo de la Gran Via ha sido el caballo de batalla de las asociaciones de vecinos de la zona durante los últimos cinco años. Al principio reivindicaban la cobertura total de la vía, pero ante el consenso al que llegaron la Generalitat y el Ayuntamiento para buscar alternativas a la cobertura total, los vecinos optaron por ponerse del lado de las administraciones y facilitar así el avance de las obras.

Manuel Martínez, representante de los vecinos, considera "muy positivo" el inicio de las obras, aunque no oculta su malestar por los "retrasos innecesarios" que se han producido. "Ahora lo más importante es que se cumplan los plazos establecidos", añade. Los vecinos celebrarán hoy una asamblea en el centro cívico del distrito para hablar de las obras y se propondrá, explica el mismo Martínez, que la plataforma cívica que defendió la cobertura de la Gran Via haga de comisión de seguimiento de las obras.