Mas defiende los contratos informáticos del Gobierno

El conseller en cap del Gobierno catalán, Artur Mas, defendió ayer los contratos por prestaciones informáticas con la empresa T-Systems, que en 2002 obtuvo adjudicaciones de la Generalitat por valor de 107 millones de euros (17.762 millones de pesetas), tres veces más de lo previsto en el convenio marco. "La posibilidad de incrementar la oferta inicial estaba prevista en el propio contrato", afirmó Mas. Los socialistas, que hoy interpelarán al Ejecutivo en el Parlament, consideran "escandalosa" la "falta de transparencia" de las adjudicaciones.

T-Systems es la heredera del Centro Informático de la Generalitat (Cigesa), que el Gobierno de Convergència i Unió (CiU) privatizó en 1998 por 18 millones de euros. Esta empresa, de cuyo consejo asesor forma parte Carles Vilarrubí, empresario próximo al presidente de la Generalitat, Jordi Pujol, facturó el año pasado a la Generalitat 107 millones de euros, cuando el contrato marco suscrito preveía un desembolso de 31,3 millones de euros.

La mayor parte de las adjudicaciones informáticas de la Generalitat se realizaron sin concurso público precisamente como consecuencia de la existencia de dicho contrato marco, que expira a finales de 2004. El PSC sostiene que un convenio de estas características supone un "fraude de ley" y advierte de que impide el libre acceso de todas las empresas del sector a concursos públicos al establecer, en la práctica, un monopolio en favor de T-Systems.

Mas defendió las adjudicaciones de la Generalitat a esta empresa y justificó el desfase entre las cifras previstas en el convenio marco y el gasto efectivo en 2002 por la puesta en marcha de la Administración Abierta de Cataluña. El conseller en cap consideró "correcto" el gasto informático del Ejecutivo catalán, del que se ha beneficiado en gran medida T-Systems.

El Gobierno catalán hizo pública ayer una nota oficial que abunda en las explicaciones dadas por Mas: se defiende la legalidad de las contrataciones, se justifica el gasto y se insiste en explicar el aumento del desembolso previsto por la puesta en marcha de la Administración Abierta. "El contrato que se firmó en 1999 preveía que se podría incrementar la demanda de servicios en función de las necesidades del momento y establecía un proceso detallado para la elaboración de los encargos y para su formalización mediante documento administrativo, sin fijar ningún máximo en el procedimiento de facturación", reza la nota.

La diputada del Grupo Socialista Teresa Serra subrayó ayer que su partido no cuestiona la inversión informática, sino la "adjudicación directa". Serra consideró "escandalosa" la "falta de transparencia" en los contratos de la Generalitat.