Las empresas de autobuses rumanas darán sus listas de viajeros a España

Las empresas rumanas de transporte por carretera que enlazan con España deberán comunicar antes de llegar a la frontera los nombres y números de documento de viaje e identidad de todos sus pasajeros. Rumania y España pactaron ayer esta medida en Bucarest dentro de un acuerdo bilateral para "atajar" la inmigración ilegal rumana, ya que desde que empezó 2002 han sido repatriados casi 29.000 ciudadanos de dicho país.

El secretario de Estado de Inmigración, Ignacio González, rubricó ayer este acuerdo en Bucarest con su homólogo rumano, Alexandru Farcas. En línea con la reforma de la Ley de Extranjería que prepara el Gobierno, desde ahora las empresas de transporte por carretera rumanas que operan con España (se conocen 60 diferentes) tendrán que facilitar el nombre, el número del billete y el del documento de identidad de todos sus viajeros antes de llegar a la frontera pirenaica.

La intención del Gobierno es anticipar el control de dichos transportes y cortar la mayor vía de entrada de inmigrantes ilegales rumanos, quienes están exentos de la obligación de solicitar visado de estancia, aunque sí de residencia. Pero también pretende que la UE legisle sobre esta materia para imponer a las compañías de transporte por tierra, mar y aire de terceros países que operen con la Unión la obligatoriedad de dar las listas de pasaje.

Interior ya había dispuesto para impedir la entrada ilegal de rumanos un sistema de controles fronterizos móviles (el tratado de Schengen impide los fijos, salvo excepciones) en La Jonquera, Camprodón, Port Bou, Les, Irún y Canfranc. Los controles permitieron localizar en 2002 a 18.312 rumanos que fueron devueltos a Francia y repatriados (en virtud del acuerdo de readmisión firmado con el vecino del norte), mientras que desde el 1 de enero hasta el 12 de mayo ya han sido repatriados otros 7.579 por la misma vía. En total, España ha enviado a Rumania por estar o intentar entrar irregularmente a 28.829 personas en dos años. La colonia de rumanos residentes legalmente en España se eleva a 33.705 personas.

El Ministerio del Interior rumano obligará a las empresas a que le faciliten los listados, que serán remitidos inmediatamente a España. Cerca de 60 empresas viajan con regularidad entre ambos países, a las que se han impuesto ya 91 sanciones por diversas irregularidades desde 2002. El Ministerio de Fomento, además, ha solicitado a sus homólogos rumanos que impidan "la salida por su frontera de vehículos de transportes de empresas no autorizadas para realizar transportes internacionales", según figura en una respuesta del Gobierno a la secretaria socialista de Políticas Sociales y Migratorias, Consuelo Rumí.

El acuerdo de colaboración bilateral incluye una nueva figura llamada "repatriación voluntaria". Ésta consiste en facilitar a los inmigrantes que no han encontrado trabajo, carecen de medios de vida y quieren volver pero no pueden por falta de dinero un billete de regreso a su país y el alojamiento y la manutención desde que solicita la repatriación hasta que se consuma.

Ambos países han acordado también la creación de grupos operativos de cooperación policial para combatir las mafias de inmigración ilegal. Como primera medida, España enviará a tres oficiales de enlace a Rumania, que también colaborarán en la "modernización" de la policía de dicho país.