La prueba del ADN implica al acusado de los crímenes del Putxet

La cosas se complican aún más para Juan José Pérez Rangel, el joven acusado de asesinar a dos mujeres en el aparcamiento del Putxet, en Barcelona, el pasado mes de enero. Una prueba de ADN realizada a la saliva encontrada en una colilla que apareció junto al cuerpo de la primera víctima, Maria Àngels Ribot, ha dado resultado positivo y confirma que fue el joven de 24 años quien se fumó el cigarrillo que apareció junto la víctima. Pérez Rangel está en prisión preventiva desde principios de febrero, acusado de los asesinatos de Maria Àngels Ribot y María Teresa de Diego en el aparcamiento los días 11 y 22 de enero.

Fuentes próximas a la investigación afirmaron ayer que la prueba del ADN es concluyente tras los análisis realizados por la policía científica en Madrid. Tras ser detenido, el acusado se ofreció voluntariamente para realizar estas pruebas, proclamó su inocencia y dijo que "todo era un montaje político".

La confirmación de que la saliva es del acusado se une a otras pruebas incriminatorias contra Pérez Rangel de las que ya dispone el Juzgado de Instrucción número 15. Hace un mes la policía aportó al juzgado otras dos pruebas: la primera, un estudio caligráfico que mostraba que Juan José Pérez Rangel fue el autor de las anotaciones manuscritas sobre los vehículos que entraban y salían del aparcamiento, situado en el número 28 de la calle de Bertran de Barcelona. La segunda, que la huella de la palma de la mano encontrada en la bolsa con la que apareció cubierta la cabeza de la segunda víctima, María Teresa de Diego, era del acusado.

En cambio, los análisis sobre los restos de piel encontrados en las uñas de la primera víctima han demostrado que eran de ella misma. Los investigadores creen que posiblemente se la arrancó ella misma al forcejear con su agresor. Tampoco han prosperado los análisis de restos de sangre hallados en las costuras de las zapatillas deportivas del acusado. La policía cree que se lavó las zapatillas, y los restos de sangre que quedaron han sido insuficientes para alcanzar un resultado científico.

El juzgado que investiga el caso también tiene pruebas de las grabaciones con imágenes del joven en la zona del Putxet y en la estación de Ferrocarrils de la Generalitat de Pàdua, cuya cámara captó el rostro de Pérez Rangel.