Respuesta al alcalde

El alcalde de Bustarviejo se ha visto en la inexorable obligación de responder al candidato de la otra coalición competidora (IU-PSOE-Independientes) en nuestro municipio con una serie de argumentos "de conciencia" sobre los que no admite "interpretaciones torticeras". Pero Julio de Mateo sabrá disculparme si me introduzco en el debate para dejar constancia de algunas puntualizaciones que considero pertinentes. Comprendo los escrúpulos morales que han impulsado al alcalde y a todo su grupo municipal a denunciar la guerra en Irak, y admito que hayan querido desligarse públicamente de la actitud mantenida en el conflicto por su anterior formación política (Partido Popular).

Entiendo, sin embargo, improcedente que tan respetable postura ética "de la situación" les haya llevado a presentar una alternativa electoral frente a su anterior formación política (Partido Popular), con la que hasta ese mismo día parecían comulgar en perfecta sincronización de objetivos. El más distante observador del suceso tiene que preguntarse si, además de posiciones de conciencia, existen otras razones de incompatibilidad menos confesables en el legítimo ejercicio de las ambiciones políticas. Porque, si "sólo" hubiese un desencuentro concreto, la ética "de la responsabilidad" les habría conducido a presentar la moción antibelicista para, al mismo tiempo, cancelar su representación en el partido; no esperar a que se produzca su expulsión por "transfuguismo".

De ahí que las explicaciones "morales" no puedan desligarse de los intereses "políticos" y haya que interpretarlas, por el momento y la ocasión elegidos, a la luz del más descarnado oportunismo.