Justicia se muestra "optimista" por la marcha de los juicios rápidos

La Comisión de Seguimiento de los Juicios Rápidos hizo ayer un primer balance "moderadamente optimista" del nuevo sistema judicial, con la tramitación de unas 5.900 diligencias urgentes en las dos primeras semanas de funcionamiento en toda España. El secretario de Estado de Justicia, Rafael Catalá, dijo que la fiscalía de Madrid funciona "satisfactoriamente" tras la polémica entre el ministro, José María Michavila, y el fiscal jefe de la capital.

Con un primer balance tras dos semanas de funcionamiento, cabe hablar de juicios rápidos convocados pero no celebrados en su mayor parte, ya que ése es precisamente el plazo de instrucción previsto por la vía rápida para delitos. Sólo los juicios inmediatos de faltas y las sentencias de conformidad -en las que el reo que se conforma con la pena solicitada por el fiscal obtiene una reducción de un tercio de la misma- ofrecen datos significativos de la actividad judicial según el nuevo sistema.

El vocal del Consejo del Poder Judicial, Fernando Fernández, puso de manifiesto que desde la entrada en vigor de la reforma las fuerzas de seguridad han remitido a los juzgados de guardia 5.944 diligencias urgentes, de las que se han derivado 2.132 juicios inmediatos de faltas, se han señalado 574 vistas rápidas por delito y se han obtenido 443 sentencias de conformidad, según un muestreo realizado sobre 53 poblaciones españolas.

Preguntado sobre la diferencia de datos entre Madrid y Barcelona anticipada por este periódico, Fernández, ex juez decano de Madrid y delegado territorial del Consejo General del Poder Judicial para Madrid capital, negó que la ciudad condal esté "a la cabeza de nada", ya que "no existe ninguna competición". Según dijo, es Valencia la que ofrece datos más positivos.

Fernández señaló que tanto en Madrid como en Barcelona se han señalado 36 juicios por delitos, y que mientras en la primera se han alcanzado 51 conformidades, en la segunda se han logrado 45. No obstante, reconoció que la mayor diferencia está en los juicios inmediatos de faltas, con 227 en Barcelona frente a los 105 celebrados en Madrid.

El ex decano de Madrid dijo que hay que tener en cuenta que en la capital de España se han dado 62 casos de trámites calificados como faltas inicialmente por la policía y que después han sido valorados de forma diferente por el juez, "y estos datos no afloran en la estadística".

En contradicción con la valoración de Fernández, su compañero del Poder Judicial Enrique López había dado previamente a conocer los datos de Valencia: 41 juicios señalados, 20 juicios de faltas celebrados y 34 sentencias de conformidad.

Tanto Fernández como el secretario de Estado de Justicia, Rafael Catalá, que presidió la Comisión de Seguimiento, desvincularon las cifras de Madrid de la polémica suscitada después de que el ministro de Justicia, José María Michavila, dijese que el fiscal jefe de Madrid, Mariano Fernández Bermejo, se había manifestado "en rebelión" con la reforma de los juicios rápidos.

Catalá recordó que Fernández Bermejo había tildado la ley de juicios rápidos de "estafa e inconstitucional", pero dejó constancia de que la fiscalía de Madrid "está funcionando satisfactoriamente, al margen de las consideraciones personales de algunos fiscales sobre si la ley es buena o mala".

Por su parte, el jefe de la inspección del ministerio fiscal, Juan José Martínez Zato, destacó el esfuerzo de todos los implicados, especialmente el de los fiscales, y se mostró "moderadamente optimista" pese a admitir que se han producido algunas disfunciones en alguna fiscalía en concreto".