Trias arremete contra Clos y califica de "desastre" la política de vivienda

Se acabó el comedimiento de Xavier Trias. En la noche de ayer y en un mitin en la plaza de Sarrià, el candidato de Convergència i Unió (CiU) a la alcaldía de Barcelona arremetió de tal manera contra el alcalde Joan Clos como nunca lo ha hecho durante esta campaña. Y, también por primera vez, el público agradeció la embestida con constantes interrupciones de aplausos.

La política de vivienda del gobierno municipal de socialistas, Esquerra e Iniciativa fue el detonante de tan airadas críticas. Trias calificó de "escándalo" y "desastre" la actuación del Ayuntamiento en esta materia sobre todo porque, dijo, la presidenta del Instituto Municipal de la Vivienda es la ecosocialista Imma Mayol. "Esto no es política progresista ni nada", afirmó. Y auguró que, a este paso, "Barcelona se quedará sin jóvenes porque todos tienen que irse de la ciudad".

Trias acusó a Clos de encarecer el precio de la vivienda al "poner a subasta el suelo público" y de incrementar la "especulación y el barraquismo interno" en Barcelona por su "nula política" de pisos protegidos. "¿Cuánta vivienda protegida hay en Diagonal Mar?", se preguntó el candidato. "Este alcalde lo ha hecho tan mal que peor no puede", sentenció.

"En algunos barrios hay 20 personas viviendo en un piso. ¿A eso le llaman política de izquierdas?", volvió a arremeter Trias, quien culpó al gobierno municipal de echarles siempre las culpas a la Generalitat y al Gobierno central, eludiendo "su responsabilidad".

Por la mañana, Trias encontró el auditorio idóneo para justitificar sus pactos con el Partido Popular en el Congreso, que tanto le reprochan los socialistas. Ante casi un centenar de empresarios, el candidato de CiU defendió los acuerdos con el PP en materia económica, por ejemplo la supresión del IAE, y reclamó la paternidad de los nacionalistas en otros, como la reforma del IRPF, la suavización del decretazo y las mejoras fiscales para los autónomos. "No me arrepiento de nada", añadió el candidato, "porque también hemos votado en contra de la guerra o la liberalización de horarios comerciales".