El partido de los Ayuntamientos
Vivimos días de oferta electoral donde los partidos políticos tratan de convencer a los ciudadanos sobre que su opción es la que mejor va a representar sus intereses a partir del próximo 25 de mayo. Ante unas elecciones municipales todos las formaciones políticas tratan de ponerse, por unos días, el disfraz de municipalistas. La realidad, según nos indica la experiencia, es muy distinta. Mientras que el PSOE parece padecer alergia a todo lo que suene a apoyar a los ayuntamientos, el Partido Popular es el único partido político en Andalucía con auténtica vocación municipalista.
El PP entiende la política como la solución de los problemas reales de los ciudadanos y, por ende, no hay mejor política que la que se realiza a pie de calle resolviendo los problemas cotidianos de los ciudadanos a través de la administración más cercana, que no es otra que los ayuntamientos.
Son muchos los que querrán confundir a los ciudadanos hablando de municipalismo, pero lo harán desde la carencia de un proyecto real. Frente a esta desnudez de ideas del PSOE, el PP siempre ha creído en los ayuntamientos, no ahora que se aproximan unas elecciones, sino en todo momento como se puede comprobar con su larga trayectoria de apoyo al municipalismo.
Así, el PP lleva años apostando por los ayuntamientos como lo demuestra que uno de los puntos centrales de su programa ha sido, es y será la Segunda Descentralización, que habrá de permitir el desarrollo pleno del Estatuto de Autonomía y la financiación adecuada para que los ayuntamientos puedan cumplir con las exigencias que demandan los ciudadanos.
Desde siempre, el Partido Popular de Andalucía ha creído en el papel fundamental de los ayuntamientos. Tras la llegada de José María Aznar al Gobierno de la nación nuestro partido ha comprendido la necesidad de potenciar la labor de los ayuntamientos como lo demuestra el hecho de que ya en el XIV Congreso Nacional, convirtió la Segunda Descentralización en el eje central de sus políticas.
El Gobierno de José María Aznar es el ejecutivo que más transferencias ha realizado a favor de las comunidades autónomas y ha avanzado hacia una administración más moderna, más ágil y más cercana al ciudadano.
Ahora, deben ser las Comunidades Autónomas las que recojan el testigo para seguir avanzando en la descentralización, procurando así la mejor asignación de las responsabilidades políticas y una mejor gestión de las políticas públicas. Para hacerlo posible, han de atribuir parte de sus competencias a los entes locales que integran sus territorios, cediendo para ello los medios humanos, materiales y presupuestarios que hagan posible una gestión adecuada. Nuestro objetivo último es el de mejorar la calidad de vida de los ciudadanos procurando una prestación más eficiente de los servicios públicos.
Son cuatro años de intensos trabajos favor del municipalismo. El 10º Congreso Regional del PP-A situó como pilar central de su proyecto político a los ayuntamientos. Ahora, de cara a las elecciones municipales el PP-A no presenta un programa electoral para los ayuntamientos; presenta cuatro. Primero fue el Manifiesto por la Segunda Descentralización. Más tarde, el Programa Marco de las Elecciones Municipales, y el Programa de las Diputaciones. Por último, el PP-A ha sido el primer partido en España en elaborar un programa específico para los municipios menores de 5.000 habitantes.
Mientras tanto, el PSOE carece de programa electoral para las próximas elecciones del 25 de mayo, a no ser que se entienda por programa el insulto y la confrontación constante con el Gobierno de la nación.
Está claro, el PP demuestra su impulso municipalista con cuatro programas frente al vacío total de ideas de un Partido Socialista que lo único que sabe es ensuciar la vida política con sus constantes ataques contra todo lo que pueda ser productivo para los ciudadanos.
La raíz del problema no viene de que el PSOE no quiera desarrollar un programa para los ayuntamientos. Ese problema hay que buscarlo en la propia cabeza del PSOE-A, en Manuel Chaves, que desde que vino a Andalucía allá por los años 90 obligado por Felipe González le ha cogido el gusto al poder centralista y ahora no quiere desprenderse de ninguna competencia, aunque ello suponga un beneficio para los andaluces.
En los doce años que lleva en Andalucía, Chaves se ha autoproclamado en virrey de los territorios de Andalucía pidiendo para sí más competencias y negándoselas por sistema a los ayuntamientos.
La política centralista y trasnochada practicada por el virrey Chaves está llevando a la total asfixia financiera de los ayuntamientos andaluces. Son muchos municipios andaluces los que se encuentran al borde de la bancarrota y su responsable directo no es otro que el presidente de la Junta de Andalucía al que no le importa hundir a las administraciones más cercanas con tal de mantener su cetro de poder.
La Autonomía tiene que servir para algo más que para pasar de un centralismo estatal a un centralismo autonómico; hablar de Segunda Descentralización es hablar de unos servicios de calidad gestionados por los ayuntamientos con una financiación clara y adecuada.
Desde el Partido Popular entendemos que ha llegado la hora de los ayuntamientos. Es mucho lo que nos jugamos el próximo 25 de mayo. El ciudadano ha de saber distinguir entre los que creemos en unas administraciones locales fuertes y entre los que no quieren ver nada más allá de San Telmo.
La gran apuesta del Partido Popular de Andalucía de cara a estos comicios es abordar la Segunda Descentralización administrativa y el Pacto Local andaluz al que se opone constantemente Chaves, el presidente autonómico más centralista de España, y que con su política obstruccionista lleva años impidiendo una mayor autonomía financiera de los ayuntamientos.
El Partido Popular pide el voto a los ciudadanos porque posee cuatro programas encaminados a conseguir amplias mayorías que hagan realidad el Pacto Local andaluz en toda Andalucía, de cara a lograr el bienestar que se merecen los ciudadanos abandonando, de una vez por todas, el maldito furgón de cola al que nos tiene condenados el virreinato de Chaves.
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