Mas acusa a ERC de "prostituir" el equilibrio territorial

La escalada verbal de Convergència i Unió contra Esquerra Republicana no ha tocado fondo. CiU digiere lenta y dificultosamente el revés parlamentario que sufrió anteayer con motivo de la reforma del nuevo sistema de elección de los consejos comarcales. Ayer mismo el conseller en cap, Artur Mas, acusó a los independentistas de "haber perdido el juicio" y "prostituir el equilibrio territorial".

"En algún momento nos pasó por la cabeza avanzar los comicios autonómicos, pero no se entendería que a tan pocos meses de las elecciones tomáramos una decisión de estas características", agregó Mas. En entrevista concedida a Catalunya Ràdio, el conseller en cap se expresó en términos agresivos por la pérdida de poder que para CiU supone el sistema de elección de los consejos comarcales aprobado por todos los grupos parlamentarios excepto CiU.

En opinión de Mas, "toda la gente de municipios pequeños de Cataluña ha quedado un poco menospreciada simplemente porque la oposición ha querido restar poder territorial a CiU". La reforma del sistema de elección de los consejeros comarcales aprobada por el Parlament haría perder a CiU, si se aplicara en estos momentos, un total de 46 representantes de la federación en estos organismos, así como la mayoría en ocho consejos comarcales. El consejero de Gobernación y Relaciones Institucionales, Josep Maria Pelegrí, se sumó al coro crítico. El político democristiano se remontó a las páginas del Nuevo Testamento y comparó a Esquerra con Judas. Y lo hizo en un documento con membrete del departamento que dirige, informa Efe.

Esquerra y Judas

En un comunicado de Gobernación, Pelegrí afirmó que "a partir de ahora ERC deberá ir con la bolsa de 30 monedas en la cintura". A juicio del consejero, con el voto de ayer en el Parlament, "ERC ha traicionado sus principios y su catalanidad", y en cuanto al PSC y el PP, considera que resulta "incomprensible y antinatural que las dos formaciones voten un mismo modelo de país".

Pelegrí afirmó que la actitud del PSC y el PP sólo se entiende "por un interés común, que es desgastar al Gobierno catalán, y por la dependencia que tienen respectivamente del PP de Madrid y el PSOE". Ante el alud de críticas convergentes, el diputado de ERC Ernest Benach exigió "respeto" y señaló: "ERC no se ha sumado a una propuesta contra CiU, sino que el resto de los grupos de la oposición se han añadido a nuestra propuesta, que consideramos la más racional, prueba de lo cual es que la mayoría del Parlament se ha puesto de acuerdo".

Según afirmó, el texto finalmente aprobado garantiza el "equilibrio entre el principio básico de la democracia de una persona, un voto, y otro principio básico para el país, el equilibrio territorial". Desmintió así que la reforma perjudique a la representación de los pequeños municipios en los consejos, asegurando que se trata de "una cuestión de voluntad política". Benach recordó que Esquerra Republicana ya reclamó la citada reforma en 1998.