El Ayuntamiento planea una reducción del número de palomas en Castellón

Acabar con unos dos millares de palomas es el objetivo del plan del Ayuntamiento de Castellón para evitar que los excrementos de estas aves provoquen el deterioro de los edificios del centro de la ciudad. Para empezar, el Consistorio lanzará una campaña para acostumbrar a los ciudadanos a que no den de comer a las palomas y evitar así que proliferen más de lo necesario y atraigan a aves que no son deseables, según el concejal de Servicios Públicos, José Pascual. El sistema para lograr la reducción se basa en la "recogida selectiva" de aves y su "selección" según su raza que, probablemente, será la zurita. Se trata de un método basado en el adiestramiento de las palomas para que acudan siempre a comer a un mismo punto y, desde éste, proceder a la selección. El antiguo cuartel de Tetuán 14 se convertirá en algo parecido a una clínica, para desparasitar y anillar las aves que posteriormente se soltarán. Así, en lugares habitualmente atestados como las céntricas plazas Mayor y de Santa Clara la presencia de aves se reducirá a dos docenas. En cualquier caso, los ciudadanos podrán acudir al Paseo Ribalta o a la calle de José María Royo, donde se crearán dos palomares para la cría controlada.