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El fiscal de 'Ardystil' dice que la falta de información de las químicas y la insalubridad originó el síndrome

El fiscal del caso Ardystil aseguró ayer, en su informe final, que la deficiente información de las químicas sobre la toxicidad de los productos y la irresponsabilidad de los empresarios al no adoptar medidas de seguridad e higiene crearon una "mezcla explosiva" que causó la muerte a seis operarios y afectó a un centenar más. El denominado síndrome laboral Ardystil -afecciones pulmonares por inhalación de productos químicos- se detectó a principios de los noventa en ocho fábricas de aerografía textil en la comarca de L'Alcoià. El ministerio público argumentó así la acusación contra 10 empresarios de fábricas de aerografía textil, para los que pide un total de 26 años de cárcel, y contra tres firmas químicas y cinco aseguradoras como responsables civiles subsidiarios. El fiscal reclama una indemnización de 5 millones de euros.

El fiscal rechazó sumarse a la petición de las acusaciones particulares de imputar a un inspector de trabajo y ampliar la responsabilidad civil subsidiaria al Estado y la Generalitat.

Para el ministerio público a lo largo de la vista oral ha quedado "meridianamente" probado que los productos utilizados en las fábricas eran suministrado por las firmas Bayer, ICI y Solvay. El fiscal sostiene que estas firmas informaron deficientemente (ausencia de un etiquetado ostensible en los envases) a los clientes sobre los riesgos de los productos al ser inhalados. La acusación pública subrayó que ha sido probada la falta de medidas de seguridad e higiene en las fábricas. Según el fiscal la responsabilidad, en este apartado, compete a los empresarios, que ocultaron datos sobre los productos usados al solicitar las aperturas.

Para el ministerio público, y en base al informe del Instituto Nacional de toxicología, esos dos factores crearon en las fábricas "una mezcla explosiva" derivada de las reacciones químicas de distintos elementos tras ser pulverizados. La inhalación de los gases causó las afecciones pulmonares a los empleados (neumopatías y fibrosis).

Los letrados de las acusaciones particulares hicieron suyo el informe del fiscal por lo que se refiere a las imputaciones de los empresarios y las químicas. Para estas partes, ha sido probada la imputación al inspector de trabajo. A su juicio, el funcionario visitó la fábrica Ardystil en plena actividad e ignoró las condiciones de seguridad e higiene del centro.

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