El consejo de Mercalicante rechaza investigar a Díaz Alperi por su responsabilidad en el desfalco

Luis Díaz Alperi, alcalde de Alicante, del PP, arrancó ayer un nuevo pronunciamiento favorable del consejo de administración de Mercalicante sobre la ausencia de responsabilidades penales de la comisión ejecutiva de la firma pública, que también preside el primer edil, en el desfalco de unos seis millones euros cometido supuestamente por el ex gerente, Emilio Clavero. El consejo constató que el agujeroafecta a la estabilidad de la empresa y acordó destinar 1,2 millones de las reservas a enjugar parte de las pérdidas, que en 2002 ascendieron a 5,9 millones de euros.

La propuesta de activar la vía penal contra el máximo órgano de control de Mercalicante a instancias de la empresa partió de la consejera del grupo municipal socialista, María Dolores Rodríguez. Ésta solicitó la convocatoria extraordinaria de la junta general para acordar que la comisión ejecutiva, órgano que además del alcalde integran otros dos ediles del PP, se responsabilice subsidiariamente por las irregularidades supuestamente cometidas por el ex gerente. Todos los miembros del consejo, excepto la edil del PSPV, votaron en contra. El alcalde insistió en su tesis de que el único responsable del desfalco es el ex gerente . "Además, este órgano [el consejo] no tiene competencias para solicitar esa iniciativa", explicó Alperi.

El juzgado que instruye los hechos, el número 1 de Alicante, imputa la comisión del desfalco al ex gerente y también ha imputado, a instancia de la acusación popular, al contable, Miguel Ángel Ramos. La juez ha admitido parcialmente una querella del PSPV que amplía la denuncia a la comisión ejecutiva. La magistrada, pese a observar indicios delictivos, no se ha pronunciado sobre la imputación del alcalde y los otros cuatro miembros del consejo.

Díaz Alperi subrayó que durante la reunión del consejo de administración no se trató, salvo la propuesta del PSPV, ningún aspecto relacionado con la investigación judicial. No obstante, Alperi sí reconoció que el desfalco ha afectado a la estabilidad financiera de la firma. "Su viabilidad económica no está en peligro, ya que su valor patrimonial es muy superior al capital social", subrayó. "Con todo, se ha acordado una reducción de capital, un mero ajuste contable, para corregir los desarreglos financieros", añadió.

Además de la reducción de capital, el consejo también acordó destinar 1,2 millones de la reserva financiera de la firma a enjugar el déficit.

El pasado año, Mercalicante acumuló unas perdidas de 5,9 millones euros, y en 2001, de 959.116 euros. Estas pérdidas han acarreado una reducción en patrimonio de la sociedad por debajo del millón de euros, cifra inferior a la mitad del capital social. Sobre la base de la ley de sociedades anónimas, para evitar la disolución de la compañía era necesario reducir o ampliar el capital en la misma medida. El consejo optó por una reducción de capital social de 1,5 millones de euros hasta situarlo en 1,9 millones, cantidad no superior al doble del patrimonio neto actual.

En el informe económico presentado por el gerente, Manuel Marco, se reconoce que Mercalicante tiene una elevada deuda con entidades de crédito cifrada en 9,9 millones de euros a largo plazo y otros 1,2 a corto. La empresa adeuda a Mercasa (firma del grupo) 3,8 millones. De ahí que de cara a los presupuestos de este año se apueste por disminuir el endeudamiento. Para 2003, la gerencia ha presentado un proyecto de presupuestos de 5, 5 millones de euros y una ganancia neta de 2,1 millones.

Por último, el consejo también aprobó encargar la realización de un peritaje del patrimonio de la sociedad y otro sobre la enajenación de una finca en previsión de su venta para garantizar la liquidez de la firma.