Maragall niega que CiU haya roto con el PP al no anticipar las elecciones

El presidente del Partit dels Socialistes (PSC), Pasqual Maragall, puso ayer en duda que Convergència i Unió (CiU) y el PP hayan "roto" sus relaciones, como proclaman los dirigentes de la federación nacionalista. "No hay ruptura porque no han convocado elecciones anticipadas", aseguró el dirigente socialista, quien invitó al presidente de la Generalitat, Jordi Pujol, a convocar elecciones antes de que finalice el fin de semana, la fecha límite si quisieran adelantarse los comicios catalanes para hacerlos coincidir con las municipales de mayo.

Los socialistas utilizarán la junta de portavoces del Parlament del próximo martes para evidenciar que ambos partidos mantienen su estrecha colaboración: volverán a someter a votación la creación de dos comisiones de investigación -sobre el caso Pallerols y el caso Turismo-, que serán rechazadas con toda seguridad con los votos de nacionalistas y populares.

El mismo PP insiste en que su apoyo a la comisión de investigación sobre el escándalo de las encuestas manipuladas del Gobierno catalán no implicará ningún cambio de actitud en su apuesta por la estabilidad en Cataluña. El vicepresidente primero del Ejecutivo, Mariano Rajoy, acusó a CiU de "refugiarse en un tema menor" para "alejarse del PP con fines claramente electorales". Rajoy insistió en que ningún dirigente de Convergència se ha dirigido al Gobierno para romper relaciones. El presidente regional, Josep Piqué añadió: "No nos dejaremos impresionar por el teatro".

CiU siguió ayer lanzando duras críticas contra el PP. Su secretario general, Josep Antoni Duran, afirmó que los populares "están al servicio del PSC para erosionar a Mas". Éste dijo que José María Aznar "pierde el norte" cuando afirma que los nacionalistas "socavan" el consenso constitucional y aseguró que ese tipo de afirmaciones dificultan cualquier colaboración futura.