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Arenas explica por separado a PA y grupo mixto el traspaso del empleo, tras el plante de PSOE e IU

El ministro anuncia la transferencia de otras 9 competencias, con un coste de 60 millones

Sólo PA y grupo mixto, además del PP, se reunieron ayer con el ministro de Administraciones Públicas, Javier Arenas, para conocer su versión del retraso de las transferencias de las políticas activas de empleo. Con los andalucistas se vio en la Delegación del Gobierno, tras rechazar éstos un encuentro sin formato adecuado en sede parlamentaria, mientras que con el mixto se entrevistó en la Cámara. IU se descolgó en el último momento por el "inminente ataque a Irak", y el PSOE ni siquiera fue convocado. No obstante, Arenas se limitó a anunciar las reuniones de hoy y el día 25 con la Junta y el traspaso de 9 competencias. "La historia del retraso con detalle la contaré después de las transferencias", dijo

La esperada comparecencia del ministro Arenas en el Parlamento para explicar el retraso de las políticas de empleo, sobre la que se han vertido ríos de tinta, se quedó en un par de reuniones consecutivas con las formaciones nacionalistas: PA y grupo mixto (uno de cuyos dos miembros, Pedro Pacheco, milita en el PSA), que no arrojaron ninguna información novedosa. El traspaso será a primeros de mayo y antes habrá nuevos contactos (hoy y el día 25). Como se había señalado, en pocos meses se negociarán nueve transferencias pequeñas que, junto a las políticas activas, suponen unos 380 millones de euros (320 millones del empleo y 60 del resto).

El ministro había rechazado asistir a la Comisión de Desarrollo Estatutario de la Cámara, de carácter informativo, con el argumento de que al Gobierno de la nación lo controla el Congreso y no las asambleas autonómicas, y que si compareciera en Andalucía "violentaría" la Constitución.

La negativa provocó un cruce de cartas una semana atrás entre Arenas y el presidente del Parlamento, Javier Torres Vela, quien respondió al ministro que su presencia en la citada comisión no está inscrita entre los instrumentos de control, sino que responde a los principios de "colaboración y cooperación", con una sesión "puramente informativa sin posterior debate".

Arenas, no obstante, se ofreció a mantener una reunión con los grupos parlamentarios fuera del formato oficial, aceptada en un principio por Izquierda Unida y grupo mixto. El PA, por su parte, declinó la invitación fuera del "marco adecuado" y pidió otro lugar. La convocatoria del Ministerio se produjo a última hora del martes y hasta ayer mismo a mediodía no se sabía con claridad quién acudiría, dónde se celebraría, cómo -por separado o conjuntamente-y de qué se hablaría.

En un primer momento, el portavoz de IU, Antonio Romero, confirmó la cita para las 16,30 horas, en contra del criterio de los socialistas, que vieron en el encuentro informal una "forma de hacer añicos las instituciones andaluzas" al no respetar las formalidades del Parlamento. La decisión de Romero, sin embargo, se fue debilitando conforme iban llegando el resto de los miembros de su grupo. Finalmente, Romero anunció la ausencia de IU con el siguiente argumento: "Una vez conocida la intención del presidente de Estados Unidos, George Bush, de atacar Irak en pocas horas hemos decidido desde la dirección federal no acudir a encuentros con los miembros del Gobierno español, ya que representan al Ejecutivo de la guerra injusta".

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Javier Arenas y tres altos cargos del Ministerio -recibidos en la Cámara andaluza por un grupo del Foro Social de Sevilla con pancartas y gritos contrarios a la guerra- se entrevistó a puerta cerrada con los dos integrantes del grupo mixto, Ricardo Chamorro y Pedro Pacheco, y la presidenta y el portavoz del PP, Teófila Martínez y Antonio Sanz. A la salida, Pacheco calificó de "fructífera" y "aclaratoria" la reunión, aunque Chamorro anunció como una "novedad muy importante" sobre financiación autonómica "que nos ha sorprendido" la última carta que remitió el Ministerio de Administraciones Públicas a la Junta el 30 de diciembre de 2002, publicada casi en su integridad por los medios de comunicación. En este escrito se ofertaba pagar la liquidación de la Participación en los Ingresos Generales del Estado (PIE) al ritmo que la Audiencia Nacional fuera fallando sobre los recursos que ha presentado el Gobierno autonómico, sin acudir al Tribunal Supremo.

Tampoco funcionó la comunicación con el portavoz del PA, José Calvo Poyato, quien se reunió con la alta jerarquía del Ministerio en la Delegación del Gobierno. Calvo aseguró al término del encuentro todo lo contrario que Chamorro: que Javier Arenas le había dicho que el Gobierno no esperaría a las sentencias de la Audiencia Nacional y que se había mostrado dispuesto a pagar las liquidaciones presupuestarias ya.

En su turno ante los medios de comunicación, el ministro aclaró el error y dijo que la postura de su Gobierno sobre financiación es la misma: "Será que no me he explicado bien". Arenas anunció los trámites para traspasar otras nueves competencia y dijo que a partir de ahora enviará todas las comunicaciones del Gobierno a la Junta a todos los grupos parlamentarios para evitar "manipulaciones".

"Un tunante y un par de oportunistas"

El portavoz del PSOE, José caballos, arremetió ayer contra Javier Arenas por sus entrevistas con algunos grupos parlamentarios fuera del formato oficial del Parlamento andaluz y llegó a decir que se trató de una "burda maniobra organizada por un tunante y un par de oportunistas". Caballos se refería a Pedro Pacheco y Antonio Romero, que finalmente se cayó del cartel. El socialista dijo que el ministro de Administraciones Públicas pretendía "lavarse la cara" porque él ha sido la "mano negra" que ha bloqueado los acuerdos con la Junta, hasta la intervención del ministro de Trabajo, Eduardo Zaplana, y calificó las entrevistas de "espectáculo bananero impresentable" y acusó al ministro de pasarse por el "arco del triunfo" el Parlamento de Andalucía.

Teófila Martínez, por su parte, dijo que Arenas "desenmascaró" ayer a Chaves y que el PSOE no había querido acudir a las reuniones para no sentir la "vergüenza" de que se demuestre que el Gobierno ha hecho todo lo posible para acelerar las transferencias y que la Junta se ha opuesto por su política de confrontación.

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