La ampliación del Retiro planeada por Siza supone demoler 314 viviendas y construir 352

"Se cambian 300 viviendas por otras 300 de superficies similares, y los que vivan allí contarán con una calidad de vida mucho mayor de la que tienen ahora". Éste es el resumen que el arquitecto Carlos de Riaño, coautor del proyecto de remodelación del eje Prado-Recoletos, ha hecho de la parte más conflictiva de esta propuesta urbanística. Se trata de la ampliación hacia el sur del parque del Retiro hasta el paseo de Reina Cristina y el barrio de Pacífico. Una propuesta que supone la demolición y nueva construcción de viviendas situadas en el llamado cerrillo de San Blas. El plan supone que, en total, serán demolidas 314 viviendas y en su lugar propone construir un total de 352.

Riaño es uno de los cuatro integrantes del equipo Trajineros que, dirigidos por Álvaro Siza, resultaron ganadores del concurso de ideas para la remodelación del eje Prado-Recoletos. Ante las voces críticas que se han levantado tras hacerse públicos parte de los planes de remodelación incluidos en el proyecto, ha querido hacer un llamamiento a la tranquilidad. "Una cosa que queremos dejar muy clara es que esta propuesta es un proyecto a largo plazo. No queremos que la gente se alarme. Estamos hablando de una media de entre seis y doce años. Y, además, todo el proyecto está pendiente de una fase de información pública en el que se escuchará a todo el mundo", afirmó el arquitecto.

Riaño explicó en profundidad cómo es la propuesta del equipo de arquitectos para esta ampliación de "más de diez hectáreas del parque del Retiro". Se había explicado que el proyecto supone la demolición del Gobierno Militar, situado en el número 5 del paseo de Reina Cristina, y de las viviendas adyacentes. Pero lo que hasta hoy no se sabía es que "en ese solar se levantará un bloque de viviendas que tendrá siete plantas en la fachada que dé al paseo de Reina Cristina y tres en su cara norte, dado que el terreno está en pendiente". Este edificio tendrá "un planteamiento distinto al de las edificaciones que existen ahora y que forman un tapón en la entrada al cerrillo de San Blas", confirmó Riaño. En esta nueva edificación también serían realojados los vecinos de las viviendas situadas en los números 27 y 29 del paseo de la Infanta Isabel, que también serán demolidas.

Tres o cuatro alturas

La colonia de viviendas que existe detrás del Gobierno Militar también será objeto de reordenación. "Será una ordenación residencial de baja densidad y alta calidad, con bloques de tres o cuatro plantas, en un entorno ajardinado. Todas ellas contarán con aparcamiento. Pero como en todos los cambios, y más en una operación de esta envergadura, se ha de contar con el apoyo de todas las instituciones. Por ejemplo, el Ayuntamiento deberá negociar con el Ministerio de Defensa el lugar adecuado para llevarse el Gobierno Militar. Lo que queremos dejar claro es que la Administración es muy generosa en estas ocasiones y las viviendas que se construyan para realojar a los vecinos de la zona no defraudarán a nadie", afirmó Riaño.

La pretensión de los arquitectos es recuperar el sueño ilustrado de la colina de las Ciencias y reconvertirlo en un complejo museístico. "Se podrían trasladar allí, por ejemplo, las colecciones del Museo Nacional de la Ciencia y la Tecnología, que no cuentan con una sede adecuada y que se completarían con los fondos del Observatorio Astronómico y la implantación del reconstruido telescopio de Herschel, sin olvidar alguna instalación del Jardín Botánico".

Para conseguirlo, Trajineros propone "la demolición de las ampliaciones recientes próximas al Observatorio, que se respetaría íntegramente, y se integra con nuevas edificaciones construidas detrás de la actual escuela de Ingenieros Técnicos de Obras Públicas". Este nuevo espacio tendría un acceso por el paseo de Reina Cristina por medio de la "construcción de otro edificio singular que sirva como entrada a todo el complejo museístico". La cubierta de este edificio enlazará con una plaza que se creará, a media ladera, sobre parte del solar que ahora ocupa uno de los bloques de casas que flanquean el Gobierno Militar. La propuesta también supone la aparición de una calle peatonal que comunique el paseo de la Reina Cristina con la calle de Juan Bautista Sachetti, incorporando a ella, para uso público, el espacio privativo de los edificios recientes que en esta manzana miran al norte.