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Necrológica:
Perfil
Texto con interpretación sobre una persona, que incluye declaraciones

Roberto Murolo, 'La voz de Nápoles'

Roberto Murolo, considerado la voz de la canción napolitana, falleció el día 14 de marzo a los 91 años en Nápoles, sur de Italia, debido a los problemas cardiorrespiratorios que padecía desde hacía tiempo.

Murolo, el cantante por antonomasia de la música napolitana, dotado de una voz dulce y melodiosa, nació en la ciudad de Nápoles el 23 de enero de 1912. Hijo del famoso compositor Ernesto Murolo, Roberto comenzó a cantar desde muy joven e inmediatamente se descubrió como uno de los más importantes valores musicales italianos.

En 1939 recorrió Europa con el cuarteto Mida, y en 1946, una vez concluida la Segunda Guerra Mundial, se dedicó a cantar en solitario. Su éxito fue inmediato: miles de conciertos, grabación de numerosos discos, actuaciones en radio y, más tarde, en televisión, y alguna incursión por el cine. Se convirtió en un personaje muy popular en toda Italia.

Su primer éxito fue la antología Napoletana, con doce canciones elegidas entre numerosas coplas de la canción napolitana que va desde el siglo XIII hasta el XX. Napoletana le consagró como La Voz de Nápoles, un título que le acompañaría durante su longeva vida.

Murolo mantuvo viva la canción tradicional napolitana, consiguió hacerla popular en el mundo entero al lograr que canciones como O Sole mio, o Cu'mme cruzaran el océano. Fue una influencia decisiva en toda una generación de músicos italianos que adaptaron la música tradicional napolitana al jazz y al rock.

Otra etapa de Murolo se inicia en los años noventa con discos como Na voce, 'na chitarra, en 1990, y Ottantavoglia di cantare, en 1992, con el que celebró sus ochenta años de edad. En 1995 grabó Anima e core, y en 2002, Ho sognato di cantare. En estos años cantaba a dúo con otros famosos cantantes italianos como Fabrizio de Andrés, Enzo Gragnaniello, Mía Martini y Enzo Arbore, su más fiel seguidor.

"Se ha ido un maestro, el fundador de una escuela", comentaba en Roma, llorando, Enzo Arbore al enterarse de la muerte de Murolo. "Pero sobre todo, se me ha ido un amigo, el hombre que me lo enseñó todo". Arbore subrayó que Murolo deja una obra que es "lo más grande que se ha hecho en la canción popular italiana".

Por su parte, la alcadesa de Nápoles, Rosa Russo Iervolino, ha señalado: "Desde hace cincuenta años, Roberto Murolo es la voz de la ciudad. Ha cantado a la esperanza, a la tristeza, los sentimientos y los sueños. Y a pesar de su enfermedad, mantuvo su mente lúcida hasta el final".-

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