Tres encapuchados roban tras un tiroteo con dos vigilantes la recaudación de un supermercado de Leganés

Nuevo tiroteo en la región y esta vez para cometer un robo. Tres encapuchados se apropiaron la tarde del lunes de los 24.000 euros recaudados por un supermercado Alcosto de Leganés, tras mantener un intercambio de disparos con los dos vigilantes de seguridad que transportaban el dinero hasta el furgón blindado. Los ladrones huyeron por las vías del tren, según fuentes policiales.

Los hechos se produjeron en el aparcamiento trasero de Alcosto, próximo al muelle de carga, al lado de la avenida del Doctor Mendiguchía Carriche, junto a la estación de tren de Leganés Centro. Los vigilantes de la empresa de seguridad Prosegur se dirigieron a las 21.10 a recoger la recaudación del establecimiento. Fuera estaba aparcada una furgoneta Nissan Trade, que había sido sustraída en el distrito de Usera.

Cuando aparecieron los vigilantes, salieron de la furgoneta tres encapuchados que, con pistolas, arrebataron el revólver y el dinero al primer vigilante. Uno de los ladrones le dijo a un compinche: "Agárrale el hierro [el arma] a ése". El segundo vigilante, que iba algo más retrasado, abrió fuego contra los atacantes, que también repelieron la agresión a tiros. La policía recogió unos 15 casquillos del lugar de los hechos. Algunos proyectiles atravesaron algún vehículo e, incluso, la ventana de un vecino de la zona. Los ladrones salieron corriendo y saltaron la valla que separa las vías del tren de la avenida. En este acto, uno de los ladrones perdió la pistola, del calibre 9 milímetros corto, cuya sustracción había sido denunciada por un militar en su domicilio. Los asaltantes salieron corriendo por las vías del tren, sin que los vigilantes lograran ver por dónde huían o si disponían de un vehículo en las inmediaciones.

La policía cree que los atacantes son de origen suramericano por los rasgos que dejaban entrever los pasamontañas que llevaban y por el acento que tenían durante la conversación. La policía analizó la furgoneta utilizada para el atraco, que quedó abandonada en el aparcamiento por si los ladrones dejaron alguna huella dactilar.