Un barrio que se cae a pedazos
Un informe vecinal advierte de que el casco antiguo jiennense tiene 203 casas en ruina y 109 solares abandonados
El casco antiguo de Jaén languidece con el paso del tiempo a pesar de los reiterados anuncios de las distintas Administraciones por preservarlo y reactivarlo. Según un informe elaborado por la asociación de vecinos Arco del Consuelo, la más representativa del casco viejo jiennense, en esta zona del sur de la ciudad, que se extiende desde la plaza del Ayuntamiento hasta las faldas del castillo de Santa Catalina, existen actualmente 203 casas en ruinas y 109 solares abandonados.
Ni siquiera la inclusión de estos barrios dentro del plan comunitario Urban, que prevé inversiones de 16 millones de euros entre la Unión Europea y el propio Ayuntamiento de la ciudad, ha logrado, dos años después de su puesta en marcha, frenar el proceso de despoblamiento y deterioro urbanístico de la zona que alberga casi toda la oferta patrimonial y monumental de Jaén.
Según los vecinos, los solares vacíos son focos de insalubridad y ratas
Antonio Lozano, presidente de Arco del Consuelo y miembro del consejo de administración del Plan Urban, ha denunciado "la situación de degradación en que se encuentra gran parte de la zona Urban", al tiempo que ha advertido a instituciones y empresas privadas del "grave estado de abandono y deterioro" de esta zona.
En el informe se señala que las viviendas y solares vacíos "constituyen, en muchos casos, focos de insalubridad, malos olores y un nido de ratas cada vez más preocupante". Y se añade que las casas abandonadas sirven igualmente de cobijo "e incluso residencia de consumidores y traficantes de drogas".
La asociación Arco del Consuelo responsabiliza de la situación no sólo al Ayuntamiento, sino también a la Junta de Andalucía y a otras instituciones públicas y privadas. En esta línea, demanda del Gobierno andaluz la aplicación del plan de infravivienda promovido en colaboración con el Ayuntamiento y que, a juicio del grupo municipal de Izquierda Unida, no se ha cumplido.
Inseguridad ciudadana por la escasez de presencia policial, falta de limpieza, caos de tráfico, falta de aparcamientos e instalaciones deportivas o la formación de güetos en el casco antiguo son otras cuestiones denunciadas por Arco del Consuelo.
Antonio Lozano pide a la Concejalía de Asuntos Sociales una "actuación más profunda en materia de realojo de las familias marginales y conflictivas". Esta reivindicación ha sido avalada también por la asociación Iuventa, que ha pedido al Ayuntamiento que distribuya la construcción de viviendas sociales por distintas zonas de la ciudad.
Sobre el problema del tráfico, el informe destaca la falta de aparcamientos y solicita la construcción de nuevas plazas así como medidas para disuadir a los conductores a aparcar delante de los monumentos. Las deficiencias en las redes de suministro de agua y saneamiento también se reflejan en el informe vecinal.
Lozano lamenta que eso provoque grandes fugas en las tuberías, además de solicitar una revisión de la red de alcantarillado para evitar los malos olores, filtraciones, humedades y la posibilidad de que estas aguas residuales puedan penetrar en la red de agua potable.
Finalmente, se demanda de las Administraciones la ejecución de los proyectos pendientes, como el teatro, el albergue juvenil, la ampliación del Instituto San Juan Bosco, la rehabilitación de la iglesia de Santo Domingo o la recuperación del barrio de la judería, que está pendiente de su inclusión en la Red Española de Juderías.
La asociación Arco del Consuelo pretende con este diagnóstico, que ha sido remitido al Ayuntamiento y a la oficina técnica del plan Urban, provocar una "movilización ciudadana positiva" hacia la rehabilitación y recuperación de estos barrios, además de "presionar a cuantas instituciones públicas y privadas estén implicadas directa e indirectamente en la recuperación del casco antiguo".
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.