Barcelona tendrá el doble de policías tras el despliegue de los Mossos

La consejera de Justicia e Interior, Núria de Gispert, aseguró ayer que cuando los Mossos d'Esquadra concluyan su despliegue en Barcelona, la cifra de agentes que patrullarán las calles de esta ciudad doblará el actual número de policías del Cuerpo Nacional de Policía. De Gispert precisó, sin embargo, que el Gobierno catalán no pretende copiar "el modelo" de la policía o de la Guardia Civil, sino que adecua el despliegue a las necesidades de cada zona: "Interior estudia las competencias que tiene y pone a disposición del ciudadano el número de mossos que juzga necesario".

La llegada de los Mossos a Barcelona, prevista para 2005, "se notará mucho", aseguró De Gispert, que ayer apostó por "una policía de proximidad, con mucha presencia en las calles" porque, agregó, "la visualización de las patrullas solventa en buena medida la sensación de inseguridad". La consejera consideró que contar con una numerosa plantilla de agentes, unos 15.000 cuando concluya el despliegue de los Mossos en Cataluña, es la mejor medida de seguridad y se mostró reacia a otras prácticas, como la videovigilancia, que "no es la panacea y además puede atentar contra el derecho a la intimidad".

El despliegue de los Mossos en el Barcelonès, que empezó el pasado enero en Sant Adrià de Besòs, es, según la consejera, "una prueba de fuego" para Interior porque "Barcelona y su entorno tienen los índices más altos de delincuencia y conflictividad de Cataluña" y "en estos momentos hay una alta sensación de inseguridad". En opinión de De Gispert, esta "sensación se debe a un incremento de los pequeños delitos", causado por factores como "la escasa dotación policial que sufre Cataluña desde hace años".

Falta de agentes

La consejera recordó que el calendario de despliegue sólo está cerrado hasta 2005 y que en algunas localidades donde se aprecian carencias, como Sabadell, Terrassa y Tarragona, aún se ignora cuándo llegarán los Mossos, de modo que "se están incumpliendo los acuerdos de varias juntas de seguridad en las que el Gobierno se comprometió a cubrir las vacantes de policías nacionales en Cataluña". El pacto, indicó la consejera, "era que los Mossos se desplegaran según el calendario y los policías que dejaran de hacer sus servicios en los municipios donde hubiera mossos se quedasen en Cataluña para cubrir las bajas", pero "a la hora de la verdad, no están".

La titular de Justicia e Interior criticó asimismo que "el Gobierno y el PP dicen que esta falta de efectivos policiales se arrastra desde el Gobierno socialista, pero llevan ocho años en el poder y podrían haber encontrado ya una solución al problema".

Núria de Gispert abordará el asunto en su próxima reunión con el ministro del Interior, Ángel Acebes, prevista para marzo, así como los mecanismos de coordinación entre la policía y los Mossos d'Esquadra durante el año de transición previo al traspaso de competencias en Barcelona.