España salva el paso a semifinales

España salvó los muebles. Necesitaba vencer a Ucrania para pasar a semifinales y con un 3-0 en el primer tiempo resolvió por la vía rápida en Aversa (Italia). No parecía lógico que el campeón mundial y europeo se fuera por la puerta de atrás sin haber siquiera conocido la derrota hasta ayer -con empates ante Portugal y Bélgica-. Y la cura de humildad resultó. En el fútbol sala ya hay un nivel suficientemente grande y generalizado como para no descuidarse lo más mínimo. España tuvo desde hace años el mérito de subirse al carro de las victorias por detrás de Brasil y luego incluso ir por delante, pero ya casi nadie regala nada.

Ucrania, que perdió precisamente la final del Campeonato de Europa de hace dos años en Moscú frente a España, por 2-1, no se jugaba nada, porque ya estaba clasificada con sus dos victorias previas. Pero España, que dominó casi por obligación, tampoco le dio respiro ni huecos para ensayar algún contraataque. Lo complicado era abrir el marcador y ponerse con ventaja, y eso lo logró Kike tras un gran pase en diagonal de Cobeta a los 10 minutos. Era justamente en la mitad del primer tiempo, cuando ya los nervios podían empezar a aflorar. Porque España estaba jugando con aplomo, sin acelerarse, pero necesitaba el premio. Y con él se asentó, no hizo faltas innecesarias, y buen fruto de ello fue el segundo tanto de Julio, seis minutos después, tras una combinación de todo el equipo hasta dejarle con espacio en la esquina para marcar pese a que el portero Popov llegó a tocar con el pie. Un 2-0 era ya magnífico, pero mucho más el 3-0 con el otro tanto de Kike, parte de habilidad al sacarle muy bien la falta a la izquierda Orol, parte por error en la barrera ucrania al no ser rápido el portero para cubrir el hueco.

La segunda parte sobró, según suele ocurrir cuando un grande se dedica a destruir y a dejar pasar el tiempo, como hizo España.