El líder británico envía una carta a los 13 para explicar la cumbre europea

La iniciativa de Blair de enviar una carta a los candidatos explicándoles la cumbre extraordinaria sobre Irak no tiene precedentes en la Unión Europea. Fechada el mismo lunes, los dirigentes de los países aspirantes a entrar en la UE la recibieron antes de comenzar ayer la reunión con los candidatos convocada por el presidente de la UE, el griego Costas Simitis, y en la que también participó Javier Solana, secretario general del Consejo.

"Todos sostenemos que Sadam no ha cooperado plenamente con los inspectores y que la responsabilidad sigue recayendo sobre él", dice Blair a sus amigos líderes de los países candidatos, con los que desea "compartir" sus "impresiones personales" sobre la reunión. "Éste es un momento definitivo para el sistema multilateral", dice el primer ministro británico, quien hace un llamamiento a la unidad de la comunidad internacional "y especialmente entre Europa y Estados Unidos, que es más que nunca de vital importancia".

La misiva llama más la atención porque su envío, pese a que todo el mundo podía prever sus negativas consecuencias, se produjo inmediatamente después de concluir la cumbre extraordinaria convocada para restañar las heridas causadas precisamente por iniciativas como la carta de los ocho.

Ayer, en declaraciones a la BBC, el comisario de Exteriores, el británico Chris Patten, dijo que la UE es "un club político, no el Pacto de Varsovia", y que, por tanto, todo el mundo tiene derecho a hablar. Su colega de la Ampliación, el alemán Günter Verheugen, achacó la carta del Grupo de Vilnius a "cierto nerviosismo" y aseguró que "esa situación no volverá a producirse" porque, como sostuvieron ayer diversas fuentes diplomáticas, "la pertenencia a la familia europea" exige más solidaridad y prudencia a la hora de adoptar iniciativas en política exterior.