"Entre lo cutre y lo elegante"

"Amo Madrid, su ambiente y su vitalidad. Me gustan sus contrastes: como estas calles, pequeñas, cutres, que albergan cosas elegantes". Así define, desde su corazón urbano mitad español mitad alemán, el galerista Rafael Vostell la zona donde aterrizó el jueves pasado con su galería Vostell Madrid, asomada a Lavapiés y a 200 metros del Reina Sofía.

El hijo del conocido artista Wolf Vostell, creador del peculiar Museo de Malpartida (Cáceres), ha escogido las vísperas de Arco para trasplantar a Madrid los contenidos de su galería berlinesa. Con el título Fluxus sin fin, Vostell Madrid muestra obras de artistas impulsores de este movimiento, como su padre, Wolf, Nam June Paik y Yoko Ono.

"Madrid y Berlín son dos de las ciudades más importantes en creatividad e innovación", dice Rafael Vostell. Y lo mismo opinan otros recién llegados a lo que llaman Distrito Arte.

"Lavapiés es un barrio con una gran densidad de artistas y gente de la cultura, con multitud de etnias, caótico y comprometido, y eso configura el espacio tanto o mas que la arquitectura", dice la pintora Lourdes Fernández, promotora de Off Limits, galería de arte y proyectos culturales.

Fernández, embarcada desde hace dos años en "acciones creativas" en Lavapiés, desea trabajar "teniendo en cuenta el tejido social y la problemática del barrio", pero cree que "todo el desembarco artístico que se está produciendo quizá modifique la personalidad de la zona en un plazo no muy largo".