Camino de la leyenda
Stockhausen continúa en la brecha levantando, pasito a pasito, con una tenacidad admirable, el edificio musical más ambicioso desde El anillo del Nibelungo, de Wagner: la ópera Licht (Luz), en siete jornadas que responden a cada uno de los días de la semana. Los datos son apabullantes: 26 años de trabajo desde el pistoletazo de salida; 27 horas de música compuesta ya; cinco días completos estrenados y varias escenas sueltas. El Festival de Canarias ha puesto en pie anteayer Hoch-Zeiten (Bodas o Buenos tiempos, según se traduzca), escena quinta de Sonntag (Domingo), una composición para coro y orquesta que se interpreta simultáneamente en dos salas.
La obra dura aproximadamente 33 minutos y se interpreta dos veces en cada una de las salas, una con la presencia de la orquesta y otra con la del coro. El espectador puede elegir el orden. Orquesta y Coro de la WDR están divididos en cinco secciones más o menos circulares, cada una con su músico guía. Durante la actuación, a través de un sistema de altavoces, a veces la orquesta se integra en el coro y el coro en la orquesta. Esta combinación de músicas visibles e invisibles produce sensaciones muy diferentes según sean los instrumentistas o los cantantes los que están a la vista del público.
Karlheinz Stockhausen
Estreno mundial de Hoch-Zeiten, escena quinta de la ópera Sonntag del ciclo Licht. WDR Sinfonieorchester Köln. Director: Zsolt Nagy. WDR Rundfunkchor Köln. Director: Rupert Huber. Control de sonido y dirección general: Karlheinz Stockhausen. Festival de Canarias. Auditorio Alfredo Kraus, Las Palmas, 2 de febrero.
Cada grupo del coro canta poemas de amor en cinco idiomas y con cinco ritmos diferentes. Generalmente el grupo de las sopranos 1, con distintivo azul celeste en el vestuario, lo hace en hindi-sánscrito; el de las sopranos 2, con un toque verde, en chino; el de las contraltos, en árabe; el de los tenores, de naranja, en inglés, y el de los bajos, en africano (suahili). Los textos proceden de diferentes fuentes tradicionales y la mayoría se encuentran transcritos fonéticamente. En la actuación coral aparece en vivo unos momentos un trompetista. Las dos salas están meticulosamente sincronizadas a través de parámetros de sonido controlados por el compositor.
Una obra directa
Stockhausen, pues, en estado puro, en sus investigaciones espaciales, aunque en esta ocasión tocando tierra, es decir, despertando emociones, especialmente cuando la música visible viene del sensacional coro de la Radio WDR. No estamos ante una apuesta cósmica "imposible" como en el cuarteto de los helicópteros incluido en la tercera escena de Mittwoch (Miércoles), sino ante algo mucho más palpable, directo, intuitivo. Hoch-Zeiten es una obra espléndida en sí misma, al margen de su integración en la ópera Licht.
Decía Steiner que, si algo es exigible a los festivales, es la apuesta por la excepcionalidad, por el riesgo, por la novedad. En esa perspectiva, el de Canarias se ha apuntado un tanto excepcional. Y su público respondió con respeto y admiración.
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