_
_
_
_
Crítica:MAZDA 6 2.0 CRDT SPORTIVE / SAAB 9-3 2.2 TiD VECTOR / VOLVO S60 2.4 D OPTIMA | COMPARATIVA BERLINAS MEDIAS TURBODIÉSEL
Crítica
Género de opinión que describe, elogia o censura, en todo o en parte, una obra cultural o de entretenimiento. Siempre debe escribirla un experto en la materia

El Mazda 6 impone su precio y equipamiento

Tres berlinas de tamaño medio con cierto pedigrí. Los Mazda 6, Saab 9-3 y Volvo S60 son tres coches familiares con un toque de exclusividad. Se sitúan a medio camino entre los modelos más populares de su tamaño (Laguna, Mondeo, C5...) y los equivalentes de las marcas de prestigio (BMW Serie 3, Audi A4, Mercedes Clase C...). Y aspiran a hacerse un hueco en el mercado aprovechando que el éxito de estos últimos, con unas ventas cada vez más masivas, está reduciendo su carácter exclusivo. Tanto Mazda como Saab y Volvo buscan convertirse en lo que en el sector del automóvil se denomina segmento premium, el más rentable y el que ocupan los fabricantes más elitistas.

Buena imagen y motores turbodiésel

En esta comparativa se enfrentan tres familiares de carácter minoritario con motores turbodiésel de última generación.

El Mazda 6 es uno de los coches más logrados del último año y ha quedado segundo tras el Renault Mégane en la elección del Coche del Año en Europa. Aporta una línea deportiva, un buen turbodiésel y unas tarifas muy competitivas, sobre todo por su espectacular equipo de serie. Se vende con carrocerías de 4 y 5 puertas y una familiar o wagon. Y hay dos versiones turbodiésel, una de 120 CV (desde 23.100 euros), y otra de 136 CV (24.050), la elegida para esta prueba.

El Saab 9-3 ha sido el último en llegar y muestra la nueva estrategia de la marca sueca, que va a apostar por el dinamismo y la deportividad. Monta un motor 2.2 TiD de Opel con 125 CV que se vende a partir de 26.300 euros (acabado Linear). Pero en esta ocasión se ha elegido el Vector (29.500), más deportivo y acorde con los de sus rivales.

El Volvo S60 es el que lleva más tiempo a la venta. Su fabricante explota su buena imagen y cuenta con un moderno motor 2.4 turbodiésel de cinco cilindros que se ofrece en dos versiones: D5 de 164 CV (29.825 euros) y 2.4D de 130 CV (desde 27.890). Este último, con el acabado Optima (30.525), similar al de sus competidores, ha sido el seleccionado.

Boletín

Las mejores recomendaciones para viajar, cada semana en tu bandeja de entrada
RECÍBELAS

Estos tres automóviles ofrecen como aliciente una imagen original y menos vista que las berlinas más populares. Pero los dos modelos suecos presentan algunas carencias, como el ESP opcional, poco acordes con su imagen de seguridad e impropias de su precio y aspiraciones comerciales: muchos coches más baratos lo incluyen de serie. Y lo pagan en el resultado.

MAZDA 6 2.0 CRDT SPORTIVE

Mazda 6 2.0 CRTD Sport
Mazda 6 2.0 CRTD Sport

Línea deportiva, detalles vanguardistas (pilotos, faros...) y una imagen con carácter. El Mazda 6 ha estado a punto de ser Coche del Año en Europa y tiene argumentos para merecerlo.

Conducción: 43 puntos (3º)
Aunque monta el motor más pequeño (2.0 de 136 CV) corre más que sus rivales, pero no es el mejor cuando se conduce: le falta fuerza por debajo de 1.600 vueltas, tarda en responder al acelerador y tiene una respuesta menos fina. Además exige reducir más en ciudad, aunque después empuja con potencia, sube hasta casi 5.000 vueltas y es el más rápido en carretera. La estabilidad es buena y da seguridad: obedece con precisión al volante, no balancea en las curvas y tiene todas las ayudas electrónicas a la conducción. En cambio, le falta mordiente al frenar, y el tacto de los mandos, menos suave, limita la calidad de conducción.

Vida a bordo: 43 puntos (1º)
Se impone porque es el más amplio: las plazas traseras ofrecen más espacio para las piernas y el maletero es mucho más grande. Además tiene muchos huecos: bolsas en las puertas, cuatro posavasos (delante y atrás), apoyabrazos hueco, una segunda guantera sobre la consola central... El interior tiene un toque deportivo, con buenos plásticos, tapicería de cuero y una consola metalizada muy aparente. Pero el diseño y algunos detalles de acabado (elevalunas, paneles de las puertas, luces del techo...) no tienen la calidad del Saab y el Volvo. Y aunque no resulta tan cómodo ni silencioso como este último, absorbe bien los baches y ofrece un buen compromiso entre estabilidad y confort.

Seguridad: 16 puntos (1º)
Viene de serie con todo: seis airbags, ABS y control de estabilidad. Y tiene un comportamiento dinámico muy ágil y seguro.

Economía: 29 puntos (1º)
Cuesta entre 3.000 y 4.000 euros menos y el equipo de serie es muy superior. Aparte de los sistemas de seguridad, añade climatizador, asientos eléctricos, radio-CD, ordenador de viaje, faros de xenón, tres años de garantía y hasta tapicería de cuero. Los consumos son un poco más altos: más de siete litros a ritmos suaves y nueve en conducción rápida y en ciudad.

SAAB 9-3 2.2 TiD VECTOR

Saab 9-3 2.2 TiD Vector
Saab 9-3 2.2 TiD Vector

Trazos sólidos, un frontal con personalidad y un estilo deportivo, con llantas de 17 pulgadas y suficiente gancho estético.

Conducción: 46 puntos (1º)
El más deportivo y divertido de conducir. Corre casi como el Mazda y tiene más fuerza a bajo régimen. El motor 2.2 TiD (125 CV) recupera desde 1.500 vueltas y a partir de 2.000 deja notar la fuerza del turbo y empuja sin esfuerzo hasta 4.500 con un sonido alegre. Es el más ágil y parece más ligero: tiene menos inercias en las curvas, obedece con rapidez y se conduce con dos dedos. Las llantas de 17 pulgadas dan sensación de seguridad y eficacia, el cambio es rápido y los frenos eficaces. Y el tacto y la calidad de conducción están a la altura del Volvo.

Vida a bordo: 41 puntos (3º)
El diseño interior es moderno y con un aire deportivo que se aprecia en el cambio, el volante y los asientos en dos tonos. Incluye un salpicadero original, las mejores salidas de aireación (se orientan en todos los ángulos), una consola central tipo avión orientada al conductor y bastantes huecos para objetos (posavasos, apoyabrazos hueco...). Pero la instrumentación está muy dispersa (cuatro pantallas) y hay detalles de acabado mejorables: ajustes irregulares en algunas piezas y unos plásticos grises que crean un ambiente algo triste y apagado. El 9-3 es más amplio que el Volvo, pero menos que el Mazda, sobre todo en las plazas traseras y el maletero, un tanto justo. La versión Vector incluye unas suspensiones deportivas algo secas, y, junto a un motor poco insonorizado, reducen el confort al viajar, sobre todo en trazados en mal estado.

Seguridad: 15 puntos (2º)
Seis airbags, ABS y reposacabezas activos de serie. Y el control de estabilidad ESP es opcional (550 euros), una laguna incomprensible. Pero tiene un comportamiento dinámico eficaz y seguro.

Economía: 23 puntos (2º)
Cuesta 3.000 euros más que el Mazda y viene menos equipado. Incluye climatizador, llantas de aleación, radio-CD, ordenador de viaje y otros detalles. A cambio gasta un poco menos: apenas siete litros en conducción tranquila, y alrededor de nueve a ritmos rápidos y en tráfico urbano.

VOLVO S60 2.4 D OPTIMA

Volvo S60 2.4 D Optima
Volvo S60 2.4 D Optima

Clásico y elegante, pero con una imagen más vista y menos moderna, el S60 aporta un frontal con clase y una línea con el estilo poderoso de Volvo.

Conducción: 45 puntos (2º)
Tiene el mejor motor, un 2.4 de cinco cilindros, y la respuesta más fina: no se nota que es diésel. Responde desde 1.000 vueltas y se estira con suavidad hasta 4.500. Pero acelera con menos empuje y corre menos, aunque permite viajar a buen ritmo. El S60 aporta una buena estabilidad, sobre todo en trazados amplios y con las llantas opcionales (16 pulgadas) de la unidad de pruebas. Las suspensiones ofrecen un buen compromiso entre eficacia y confort, y, aunque acusa más el balanceo en las curvas, responde siempre con nobleza y da seguridad cuando se viaja. Además tiene un buen cambio, los frenos paran bien y ofrece una calidad de conducción más agradable y unos mandos más suaves.

Vida a bordo: 43 puntos (1º)
El más atractivo y cuidado por dentro, con plásticos y materiales de calidad, buenos ajustes y un aspecto distinguido. Y el mejor pensado para la vida a bordo: asientos más grandes, un apoyabrazos hueco muy amplio, dos posavasos, bolsillos en el frontal de las banquetas delanteras... Destaca el diseño del salpicadero, que integra una consola moderna y atractiva. Pero aunque las plazas delanteras dan sensación de amplitud, las traseras son las más pequeñas, el acceso es incómodo y falta altura y espacio para las piernas. Y el maletero también es justo. El Volvo es el mejor para viajar: la suspensión filtra todo en silencio, da más sensación de aplomo y está mejor insonorizado.

Seguridad: 14 puntos (3º)
Incluye seis airbags, ABS y reposacabezas activos. Pero el control de estabilidad es opcional y caro (781 euros). Y tiene un comportamiento dinámico menos ágil y eficaz.

Economía: 22 puntos (3º)
Cuesta 4.000 euros más que el Mazda y viene menos equipado de serie. Incluye climatizador, tapicería de tela y cuero, y ordenador de viaje, pero el equipo de música es opcional. En cambio, gasta casi un litro menos: seis litros en conducción suave y ocho a ritmos rápidos y en ciudad.

CONCLUSIÓN

Más amplio por dentro, con un maletero más grande y un precio sensiblemente más ajustado que sus rivales, entre 3.000 y 4.000 euros. Y, además, las mejores prestaciones y un equipamiento de serie impecable, con todos los dispositivos de seguridad y hasta tapicería de cuero. Con estos argumentos, el Mazda 6 2.0 CRDT Sportive se impone con claridad en esta prueba.
El Saab 9-3 2.2 TiD y el Volvo S60 2.4D alcanzan en la práctica un empate técnico. El primero se impone por poco gracias a un comportamiento deportivo eficaz y seguro, un precio 1.000 euros más bajo y un equipo de serie algo superior.
El Volvo ofrece el motor más fino, el interior más elegante y las plazas delanteras más confortables. Es el mejor para viajar y el que menos gasta, pero le falta espacio atrás, y, sobre todo, cuesta más caro y viene peor equipado que sus rivales.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_