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Caja Madrid gana sólo un 2,2% más tras realizar provisiones voluntarias

La entidad se aleja del objetivo del 10% y augura un 2003 "difícil"

Íñigo de Barrón

El presidente de Caja Madrid, Miguel Blesa, anunció ayer que la entidad ganó 497,1 millones de euros en 2002, un 2,2% más que el ejercicio anterior, y admitió que afronta este ejercicio "con pocas alegrías", marcado por "la incertidumbre, volatilidad e inestabilidad". "Será un año difícil porque caerán los principales márgenes del negocio", añadió. Ante estas "sombras", Blesa aseguró que la entidad "ha seguido los consejos del Banco de España, que recomendó prudencia". "Hemos realizado unas provisiones voluntarias de 41 millones de euros". Sin esta carga, el beneficio neto habría crecido un 8,8%, frente al objetivo anunciado del 10%.

El presidente de Caja Madrid no quiso dar ninguna previsión para 2003, pero reconoció que ya no contarán con los 102 millones de euros procedentes de las plusvalías de la venta de un paquete en Telefónica, "por lo que los beneficios aumentarán principalmente por las participadas". Los beneficios procedentes de las empresas en las que participa Caja Madrid crecieron un 51,4%. Mapfre aportó 66 millones, un 45% más; Iberia, 15 millones, un 283% más, y Realia (alianza inmobiliaria con FCC), 29 millones, un 78% más. Aunque la principal fuente de beneficios de la caja es Endesa, en la que posee el 5%. El año pasado, sin embargo, la aportación de la eléctrica cayó un 6,3%, lo que augura que los resultados de Endesa en 2002 habrán descendido en la misma proporción. Fuentes de Endesa se remitieron a la presentación de resultados que realizará en próximas semanas. Estos resultados contrastarían con los que obtuvo la eléctrica hasta septiembre, cuando su beneficio neto fue de 1.102 millones de euros, un 5,3% más que el mismo periodo de 2001. En esa fecha, la compañía decidió reducir sus inversiones en 3.300 millones de euros, un 25%, y revisar el calendario de aplicación del plan de negocio. Endesa atribuyó el crecimiento del beneficio a la desinversión en Viesgo, que generó una plusvalía de 930 millones. La compañía destacó la provisión de las inversiones y préstamos en Argentina, con un impacto negativo de 192 millones sobre el resultado.

Los beneficios aportados a la caja por Endesa, en la que posee el 5%, cayeron un 6,3%

Caja Madrid prepara un nuevo plan estratégico, después de concluir el de 1998-2002. Blesa explicó que, en cinco años, Caja Madrid ha superado los objetivos: ha triplicado el beneficio bruto; ha conseguido elevar su balance a más del doble, y ha ganado 1,4 millones de clientes (más de 300.000 en el último año). El único objetivo que no ha alcanzado ha sido el de lograr que cada cliente tenga cuatro productos contratados con la caja (se ha quedado en una media de 3,7).

El volumen de créditos aumentó un 8,3%, mientras los recursos de clientes lo hicieron en el 6,7%, ambas cifras por debajo de la media del cajas. Para este año, Blesa no adquirió compromisos sobre la evolución de la cuota de mercado: "Ante la incertidumbre, hay que ser cauto y riguroso".

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Sobre la firma

Íñigo de Barrón
Es corresponsal financiero de EL PAÍS y lleva casi dos décadas cubriendo la evolución del sistema bancario y las crisis que lo han transformado. Es autor de El hundimiento de la banca y en su cuenta de Twitter afirma que "saber de economía hace más fuertes a los ciudadanos". Antes trabajó en Expansión, Actualidad Económica, Europa Press y Deia.

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