_
_
_
_
_
OPINIÓN DEL LECTOR
Cartas al director
Opinión de un lector sobre una información publicada por el diario o un hecho noticioso. Dirigidas al director del diario y seleccionadas y editadas por el equipo de opinión

Els Robadors

A la declaración del alcalde de Barcelona de que la reforma urbanística de Illa Robadors en la Rambla del Raval tendrá un efecto "contundente", conviene precisar aquí en qué sentido.

Primero: el rechazo del Ayuntamiento a la propuesta vecinal de desplazar unos metros la rotonda norte de la rambla para salvar el inmueble modernista Casa Buxeras de su derribo y de reducir las desproporcionadas dimensiones de una plaza. Es habitual que el Ayuntamiento prefiera discutir los planes urbanísticos con grandes agentes económicos e inmobiliarios y grandes firmas de arquitectos olímpicos a hacerlo con los vecinos afectados en particular.

Segundo: en el espacio que queda por urbanizar de la Illa Robadors, en el que inicialmente estaba prevista la construcción de edificios de una altura máxima de siete plantas y una zona verde, ahora se edificará, además de viviendas y oficinas, un mamotreto hotelero de 10 plantas, monumento a la humildad de los arquitectos.

Para la reforma deberá modificarse ad hoc el Plan General Metropolitano, aunque quizá la anchura de la plaza permita esa sobreedificabilidad o que ésta sea equiparada a la ya existente del Liceo, otro mamotreto de realización sospechosísima. La zona verde pública prevista, un espacio roñica y árido siguiendo esa moda neoliberal de ceder a duras penas un rincón libre para las gentes sin mucho coste de mantenimiento, parece ser que será de titularidad privada, del complejo que se edifique.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_