Vizcaya atendió a 5.700 mayores en 2002, con un coste de 24 millones
La Diputación de Vizcaya atendió el pasado año a casi 5.700 personas mayores, a través de cuatro programas asistenciales, lo que supuso un coste de 24 millones de euros. El número de beneficiarios aumentó un 33% respecto a 2001, según aseguró ayer el diputado foral de Acción Social, Ricardo Ansotegi (PNV).
Ansotegi dijo que el tiempo de espera de ingreso en una resudencia se ha reducido ahora a una media de mes y medio, aunque hay "casos que pueden estar cuatro meses". "Pero es porque quieren ir a un centro concreto", puntualizó. Así, las 500 personas consideradas dependientes que esperaban su ingreso en una residencia en 2001 disminuyeron el pasado año a 99. Este salto se explica por las 600 nuevas plazas creadas, mayoritariamente en residencias privadas, y la mayor agilidad en los sistemas de valoración.
El ingreso permanente en estos centros es el principal programa asistencial para los mayores en Vizcaya y se lleva la parte principal de la consignación: 22,5 millones de euros en 2002. Este servicio tiene un coste diario por persona de 46,43 euros, de los que el beneficiario paga el 25%. Otro programa son los centros de día, donde la mayoría de los usuarios son personas no dependientes. Es, según Ansotegi, "un servicio poco conocido". Ahora hay 700 usuarios y el pasado año hubo un total de 280 ingresos. La lista de espera también se ha reducido en dos años de 125 a 24 personas.
En cambio, las estancias temporales en residencias por vacaciones o enfermedades de familiares se redujeron el pasado año: hubo 196 frente a las 207 de 2001. El cuarto programa, las telealarmas, sigue creciendo y el pasado año se instalaron más de 2.500 aparatos.