Ana Pastor no se descarta

En el PP ya no ocultan que la crisis del Prestige ha debilitado la autoridad de Fraga, quien ha vivido estos días escenas insólitas hasta hace poco tiempo, como una acalorada discusión entre los consejeros en una reunión oficial del Gabinete. Y el propio presidente no ha ocultado que para realizar la remodelación del Gobierno está pidiendo su opinión a todos los miembros del Ejecutivo.

Para paliar ese debilitamiento del poder de Fraga, desde el PP han sugerido al jefe del Gobierno autónomo que medite la idea de nombrar un vicepresidente. Fraga nunca ha tenido un número dos oficial en el gabinete para evitar las rivalidades entre los aspirantes a sucederle. Pero ya no descarta la idea, ni siquiera ante los periodistas.

Para ese cargo se han citado varios nombres: el secretario regional del partido, Jesús Palmou; el consejero de Economía, José Antonio Orza, y la ministra de Sanidad, Ana Pastor, que goza de la plena confianza de Mariano Rajoy.

Pastor estuvo ayer en Santiago de Compostela y no se descartó para ningún puesto. La ministra, vinculada a Pontevedra, dijo que ni siquiera ha leído las informaciones que apuntan a su hipotético retorno a Galicia para foguearse como sustituta de Fraga. Pero ante la insistencia de los periodistas por saber si ha hablado con el presidente gallego, comentó que suele conversar con él "con mucha frecuencia", sobre "todos los asuntos que competen a Galicia". "Los intereses que compartimos son muchos", concluyó Pastor.