"En Cuba, hasta los niños tienen conciencia literaria"

Con casi 20 años de trayectoria, la revista de literatura Amilamia prepara su página en Internet (www.amilamia.net) al tiempo que emprende una colaboración con los centros escolares cubanos. Lo que nació en Vitoria como foro abierto a la creación de poetas consagrados y noveles, acaba de estrenarse en la colaboración internacional con la escuela Tomás Romay Chacón de La Habana. El director de la publicación, José Luis Pasarín (Vitoria, 1943), reflexiona sobre estos cuatro lustros de la revista.

Pregunta. ¿Cómo surgió Amilamia?

Respuesta. A principios de los años ochenta, notamos un vacío en las publicaciones culturales en Vitoria, sobre todo en cuanto a creación poética. La primera revista la empezamos a preparar en una bodega de la calle Francia, la imprimimos con unos medios muy rudimentarios. Pero ya incluimos la premisa de que la portada fuera de un pintor alavés. Gert Voor in't Holt, autor de la del último número, ha sido el primer fotógrafo.

P. Desde el principio contaron con la colaboración de escritores reconocidos.

R. Entre nuestros colaboradores famosos se encuentran Bernardo Atxaga, Alfonso Sastre o Leopoldo María Panero. Pero nuestra voluntad fue siempre la de crear también un medio de comunicación para aquél que no había escrito nada más que un poema en su vida.

P. Ahora se presentan en Cuba.

R. Siempre hemos mantenido correspondencia con creadores latinoamericanos, pero en Cuba encontramos una relación fluida con un grupo de poetas. Y de repente, se sumaron unos niños, a los que también dimos cabida.

P. Eran los alumnos de la escuela Tomás Romay Chacón.

R. Efectivamente. Los mismos que han sido protagonistas de nuestra colaboración dentro del proyecto Haciendo almas que han emprendido varios poetas cubanos para estimular la creatividad literaria.

P. ¿En qué ha consistido la ayuda?

R. De momento, hemos querido empezar por lo más básico: el envío de material escolar y libros divulgativos. Lo hemos hecho en colaboración con la asociación Euskadi-Cuba y el Ayuntamiento de Vitoria.

P. Después de todo este tiempo al frente de una revista de literatura, ¿cuál es su diagnóstico de la creación poética?

R. Se escribe mucho, pero sin conciencia de escritura; hay un exceso de autobiografía, donde se antepone lo personal a lo literario. Algo que, por cierto, no ocurre en Cuba, donde hasta los niños tienen conciencia literaria. Todo el país (continente y contenido) es una pura expresión creadora.