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Ficosa cierra una fábrica en Rubí, pero recoloca a los 160 empleados

El presidente de la firma garantiza a la plantilla la continuidad del puesto

La principal empresa de componentes del automóvil de capital enteramente español reestructura parte de su producción. Ficosa Internacional ha decidido cerrar una de sus plantas ubicadas en Rubí, que se dedica a la inyección de plástico para fabricar viseras parasol para automóviles, pero "recolocará a los 160 trabajadores afectados en otras factorías de Rubí y Mollet", afirma su presidente, Josep Maria Pujol.

Fico-ITM, filial de Ficosa Internacional y propietaria del centro de Rubí, trata de contrarrestar la actual dispersión de su producción de plástico inyectable. Para ello, ha decidido concentrar en su factoría de Soria toda la actividad de inyección, y en otra planta, situada en Sant Guim de Freixenet (Segarra), el ensamblaje de los parasoles.

El cierre de la factoría de Fico-ITM de Rubí fue confirmado ayer por fuentes ejecutivas de la empresa y por medios sindicales vinculados al grupo de componentes. El responsable de política sectorial de la federación del metal del sindicato Comisiones Obreras de Cataluña, Pere Colell, manifestó, por su parte, que "se trata de una medida no traumática y que el sindicato y la empresa mantienen una negociación".

Por su parte, Josep Maria Pujol manifestó que la operación aún está en proceso de negociación con los representantes sindicales, y reiteró que, cualquiera que sea el acuerdo al que se llegue, "la plantilla se recolocará, y no en Soria ni lejos de Cataluña sino en otras plantas de Ficosa en la misma ciudad de Rubí -Fico-Transpar, que fabrica limpiaparabrisas y emplea a 260 personas; Fico Cable, con 448 trabajadores, y Fico Triad, que produce cajas de cambio y que tiene una plantilla de 600 personas- o en Mollet; y, en los casos en que exista acuerdo para un posible traslado, "en otra planta catalana como la de Sant Guim".

'Capitán' de industria

Josep Maria Pujol Artigas, capitán de industria y agitador cultural -desempeña la presidencia de la Universidad Internacional-, agigantó un negocio familiar de Granollers (Vallès Oriental) y se puso el mundo por montera a base de instalarse allí donde nace el just in time de cualquier cabecera, no importa si es Seat, BMW, Mercedes o Ford.En 1996, Ficosa Internacional irrumpió en la globalización: se instaló en Detroit -el corazón de la metalurgia mundial- y en Uruguay, la puerta del Mercosur. Hoy tiene 30 filiales en Europa, América y Asia. Factura 700 millones de euros.

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