"El verso de Calderón es arduo para el actor"

Casa con dos puertas, mala es de guardar es la primera oferta teatral de Barakaldo en el reciente 2003. Se trata del estreno en Euskadi de la adaptación de la obra de Calderón de la Barca preparada por Adolfo Marsillach poco antes de fallecer. La comedia cuenta con la dirección de Alfonso Zurro y un reparto encabezado por la actriz María José Goyanes, quien ofrece más detalles de la obra.

Pregunta. Dice que esta obra es precursora del vodevil.

Respuesta. Absolutamente. Casi todos los autores de nuestro siglo de oro tienen comedias fantásticas, aunque Calderón está más vinculado a los grandes dramas, a los autos sacramentales y a la cosa filosófica, que a la gente quizá le tira un poco para atrás. Aquí hay que quitarse ese chip y ponerse el de que es un Calderón divertido.

P. ¿Invita a la carcajada continua?

R. Sí, juega con el inmortal tema del amor, de los celos, del eterno femenino. Aunque mi personaje es muy honesto, sufre un montón porque le llueven todas las bofetadas. Es muy divertido porque tiene ese giro.

P. ¿Al público no se le atraganta el verso?

R. Creo que no, a pesar de que Calderón tiene un verso duro. Sí exige un trabajo arduo para el actor, pero una vez que lo desentrañas y lo haces tuyo, en vez de ser un corsé es como si te diera alas. Conecta porque lo que dice es muy bonito, como hablar poemas.

P. La gente se cansa del cine en blanco y negro, pero no del teatro clásico. ¿Cuál es su secreto, por qué gusta tanto?

R. Porque los clásicos han alcanzado esa categoría porque eran geniales. Los grandes hablan del alma, de los sentimientos, algo inherente al ser humano y que seguirá funcionando pasen los años que pasen.