"Diligencia" en la comisaría de Málaga

El delegado del Gobierno en Andalucía, Juan Ignacio Zoido, salió ayer en defensa de la actuación policial en el incendio del pasado día 27 en los calabozos de la Comisaría de Málaga, que ha causado la muerte de cuatro inmigrantes. Según Zoido, esa actuación fue "regular, ordenada y muy diligente" y evitó "que las desgracias personales fueran mayores".

Zoido también defendió la decisión policial de encerrar en el mismo calabozo a los 17 inmigrantes que ocupaban una patera interceptada el día 26 frente a las costas malagueñas. Esa decisión ha sido muy criticada porque supuso encerrar juntos a los inmigrantes que sólo esperaban la expulsión junto a las personas que habían cobrado por transportarlas ilegalmente a través del estrecho de Gibraltar. De hecho, fuentes policiales han designado a Patrick Arhaban, el jefe de la red de tráfico de inmigrantes que cobró 5.000 euros a cada uno de los pasajeros, y Abderraman Bouzian, patrón de la embarcación, como los principales responsables del incendio. Ambos fueron también los primeros en fallecer.

Según la versión que expuso ayer Zoido en conferencia de prensa, la policía sólo confirmó que Arhaban y Bouzian eran los traficantes después del incendio. "Antes nadie había declarado quién era el patrón de la patera y por tanto estaban todos juntos porque estaban siendo identificados para determinar su grado de participación en esa llegada irregular a España".

El delegado del Gobierno sostuvo que "es habitual que nadie quiera delatar al patrón de la patera" porque las redes ilegales están "extorsionando permanentemente" a los inmigrantes.