La violencia sexista ha descendido un 43% en la región respecto a 2001

La región ha experimentado una importante reducción en el número de homicidios registrados durante el presente año. Frente a las 97 muertes violentas contabilizadas en 2001, 74 personas fueron asesinadas desde enero y hasta ayer en la Comunidad de Madrid, lo que supone un descenso del 23,7% en este tipo de criminalidad, según datos facilitados por fuentes policiales. La violencia doméstica, con cuatro casos, es el capítulo que más baja (el año pasado hubo siete víctimas). Además, la eficacia policial ha aumentado, al lograr esclarecer y detener a los autores de 52 de las 74 muertes.

El descenso de los homicidios contrasta con el aumento de la delincuencia que sufre la región. Según el Instituto de Estudios de Seguridad y Policía (IESP), dependiente del Sindicato Unificado de Policía, las infracciones penales (faltas más delitos) han subido un 11,3% en los diez primeros meses de 2002 en el territorio dependiente del Cuerpo Nacional de Policía, es decir, en la capital y los 12 municipios de la periferia que superan los 50.000 habitantes. De esta forma, los hechos delictivos conocidos por la policía han pasado de 277.000 en 2001 a 308.400 durante el presente año. Madrid está la tercera en la clasificación por tasa de criminalidad, tras Baleares y la Comunidad Valenciana, con 69,9 infracciones por cada 1.000 habitantes.

- Ajustes de cuentas. Los ajustes de cuentas son, según fuentes policiales, una de las causas más frecuentes de los homicidios registrados en Madrid. Sólo en el caso de la capital, 19 muertes violentas se han atribuido a este móvil. Le siguen las peleas callejeras (con 13).

Hay otros motivos más infrecuentes, como que el homicida actúe en defensa propia o de sus bienes. En la región se han dado dos casos de este tipo. El primero ocurrió en Alcalá de Henares, cuando el dueño de un chalé, Joaquín Bueno, de 36 años, mató a J. H. H. R., un colombiano de 31 años, que entró a robar en su casa. Idéntica situación se produjo cuando el inspector de policía Ismael L.-A. G., de 54 años, mata de un disparo en el corazón a Pablo Javier Rubio Aguado, de 30 años, cuando éste intentaba atracar la farmacia de su esposa el 15 de octubre.

- Más españoles. Las víctimas españolas dominan la lista negra de fallecidos, tanto en la zona controlada por la policía como en la de la Guardia Civil. De los 74 fallecidos, 44 eran españoles, 10 colombianos, 6 ecuatorianos y 3 rumanos, además de otras procedencias, como dominicanos y puertorriqueños.

Destaca el importante descenso de víctimas colombianas. Frente a las 19 habidas en 2001, este año sólo se han registrado 10. La policía atribuye esa reducción al cerco al que ha sometido a las bandas mafiosas y a la obligatoriedad impuesta a los colombianos de presentar visado para entrar en España. "Antes, venían, mataban y se iban. Ahora se quedan en España y se exponen a ser detenidos", dicen esas fuentes.

- Mayor eficacia policial. La resolución de los homicidios ha crecido durante el presente año. Este año han sido esclarecidos 48 asesinatos en el territorio del Cuerpo Nacional de Policía, lo que supone un 69,5% del total (un 5% más que el año pasado). En la zona controlada por la Guardia Civil, donde se han registrado cinco homicidios, la efectividad sube hasta el 80%, ya que han sido arrestados los autores de cuatro homicidios. El último fue el más rápido en ser aclarado. El vecino de Colmenar Viejo Sixto Jaime Sanz de Lema, de 54 años, murió degollado la madrugada del 26 de noviembre junto a su domicilio, al tratar de evitar el robo en el bar de unos amigos. Cuatro delincuentes fueron detenidos esa misma tarde con parte del botín y la ropa manchada de sangre de la víctima.

- Tres distritos, a la cabeza. Los distritos madrileños de Chamartín, Centro y Puente de Vallecas son donde ha habido más homicidios (seis muertos cada uno). Por el contrario, algunos distritos, como Barajas, Chamberí o Moratalaz, han quedado limpios.

Uno de los casos que más ha engordado la estadística policial y que todavía sigue sin aclarar ocurrió el pasado 11 de abril en el número 20 del paseo de La Habana (Chamartín). Un incendio intencionado causó la muerte de cuatro personas: la familia compuesta por Ramón Saavedra Herrero, de 61 años; Concepción Castaño, de 67, y el hijo de ambos, Luis, de 39; junto con su vecino Jesús Álamo Rejas, de 55 años. El incendiario sigue libre.

- Alcorcón, el récord. Por municipios, Alcorcón encabeza la lista de homicidios. Este municipio, que se caracterizó en 2001 por ser el más seguro de la región, ha sufrido cinco asesinatos, y todos ellos, entre los meses de mayo y julio. El más sangriento ocurrió el 27 de julio, cuando un vecino del número 9 de la calle de Porto Lagos, Ignacio García Margarit, de 48 años y con problemas mentales, mató a cuchilladas a los porteros de la finca donde vivía, Francisca Benito Rico y Francisco Espinosa Valverde, ambos de 60 años.

- Mayo, el más sangriento. Mayo, con 13 víctimas, fue el de más trabajo para los agentes del Grupo de Homicidios. El día 4 de este mes se registró uno de los casos más dramáticos: la pareja de ex toxicómanos formada por Juan Modesto Hernández Bolado, de 36 años, y María José Gabarri Jiménez, de 32, junto con su hijo, de sólo un año, murieron en el número 156 de la calle de Ramón Pérez de Ayala (Puente de Vallecas) por los disparos efectuados contra ellos por el vecino del segundo, Miguel Ángel Navarro, de 34 años. Se inició una discusión por la venta de un talonario de recetas robado en un centro de salud del distrito. El homicida bajó después los tres cadáveres al soportal y, tras ponerlos bajo un colchón, les prendió fuego.

- De madrugada y mañana. Las madrugadas y las mañanas son las más habituales para los homicidios. Más del 70% de las muertes se han producido en la franja horaria comprendida entre la medianoche y el mediodía. Uno de los más graves se produjo a las 0.05 del 11 de mayo, cuando murieron tiroteados Ángel Sánchez Pardo, de 52 años, y su hijo mayor, Ángel Sánchez Nieto, de 26 años, en la calle de Antonio López, bajo el puente de Praga (Usera). Este caso fue resuelto el 12 de agosto. En un tiroteo en la calle de Francisco Madariaga (Ciudad Lineal) murió el inspector de Homicidios Salvador Lorente, de 48 años, y el agresor, el colombiano Carlos Arturo Velázques, de 39 años, fue abatido por los compañeros del policía. La pistola del asesino fue la usada en el doble homicidio de Usera.