Los vecinos de Afganistán se comprometen a respetar su integridad territorial

Los dirigentes de los seis países vecinos de Afganistán (China, Pakistán, Irán, Uzbekistán, Tayikistán y Turkmenistán) se reunieron ayer en Kabul en torno al presidente afgano, Hamid Karzai. Los representantes de estos Estados de Asia central adoptaron la Declaración de Kabul, en la que se comprometen mutuamente a respetar su integridad territorial y su independencia. "Esperamos que esta declaración pondrá el acento en la cooperación y el respeto mutuo de la soberanía y la no injerencia en los asuntos internos de cada uno de los países", aseguró Karzai.

El pacto, que había sido anunciado durante la segunda cumbre de Bonn el mes pasado, se produjo en presencia de observadores de Naciones Unidas, la UE, el G-8, la Organización de la Conferencia Islámica, India y Arabia Saudí. La reunión también marcó el primer aniversario de la llegada de Hamid Karzai al poder, el 22 de diciembre de 2001.

El presidente inauguró la conferencia con una exaltación de los progresos conseguidos en materia de seguridad durante ese periodo. "Afganistán puso fin el año pasado a un periodo sombrío de su historia para entrar en una era en la que los derechos de cada hombre, mujer o niño deben ser garantizados, y nuestras relaciones, individuales y nacionales, con el resto del mundo, especialmente con nuestros vecinos, mejoradas", dijo Karzai.

Durante 23 años de guerra, Afganistán ha tenido relaciones complicadas con sus vecinos, desde la invasión de la Unión Soviética en 1979 hasta la colaboración de Pakistán con el triunfo de los talibanes en 1996. "Esta declaración debe sentar las bases jurídicas para una nueva base legal sobre la que asentar nuestras relaciones", dijo Karzai.

A pesar de las optimistas palabras del presidente afgano, la violencia sigue marcando la vida en Afganistán. De hecho, la conferencia comenzó con un minuto de silencio en memoria del soldado estadounidense que murió el sábado en una emboscada de presuntos miembros de Al Qaeda.