El BCE rebaja la previsión de crecimiento para 2002 y 2003
El año que viene tampoco será el de la recuperación. El Banco Central Europeo (BCE) recortó ayer a casi la mitad su previsión de crecimiento para la zona euro en 2003. La debilidad de la demanda y de las inversiones hará que la economía crezca entre el 1,1% y el 2,1%, según la autoridad monetaria. Para este año, el crecimiento estará entre el 0,6% y el 1%. Estas previsiones, dadas a conocer ayer, justifican a posteriori la decisión del 5 de diciembre de recortar en medio punto el precio del dinero, hasta el 2,75%.
Aquel día, Wim Duisenberg explicó su decisión de rebajar los tipos, tras más de un año de resistirse a todas las presiones, asegurando que "los riesgos negativos para el crecimiento económico no se han desvanecido". El presidente del BCE no quiso ofrecer más detalles. Pero ya disponía de los datos publicados ayer en el boletín mensual de diciembre, y que son marcadamente más negativos que las últimas previsiones del organismo.
El crecimiento previsto para el año que viene se reduce a la mitad. El BCE sitúa la horquilla de aumento del PIB en 2003 entre el 1,1% y el 2,1%, claramente por debajo de los valores que esperaba hace seis meses: entre el 2,1% y el 3,1%. La autoridad monetaria ofrece estas nuevas cifras tras constatar que, a lo largo de este año, "la contribución al crecimiento por parte de la demanda interna ha sido de prácticamente cero".
Las bolsas europeas encajaron mal la rebaja del crecimiento previsto. Los principales mercados perdieron más del 1%, encabezados por el alemán, que retrocedió un 2,63%. El Ibex 35 de la Bolsa española bajó un 1,88%. En los descensos bursátiles influyó también el dato del déficit por cuenta corriente de Estados Unidos, que descendió un 0,5% en el tercer trimestre en relación con el periodo anterior, hasta 127.000 millones de dólares, la primera caída desde el tercer trimestre de 2001.
Reformas necesarias
En repetidas ocasiones, Duisenberg ha afirmado que considera que la economía europea dispone de un potencial de crecimiento en torno al 2,8%, en tanto en cuanto los Gobiernos europeos no aborden reformas estructurales para eliminar ese techo. Eso significa que en sus previsiones de junio, el BCE creía que la zona euro crecería a una tasa cercana a ese valor en 2003, y que, por tanto, la crisis desatada tras el desplome de la nueva economía hace dos años estaría prácticamente liquidada. Ahora habrá que esperar otro año, según los expertos del BCE, para alcanzar ese ritmo de crucero. En 2004, la horquilla de crecimiento se sitúa entre el 1,9% y el 2,9%.
La escasa demanda interna, la falta de tirón de las exportaciones y la negativa de las empresas a invertir más son las principales causas del recorte en la previsión de crecimiento del BCE. En inflación, por el contrario, apenas se registran cambios. El BCE considera que el año que viene los precios en la zona euro subirán entre un 1,3% y un 2,3% (entre el 1,3% y el 2,5% en el informe de junio).
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.