El cura Castillejo busca en Roma los apoyos que no encuentra en Córdoba
El presidente de Cajasur, el sacerdote Miguel Castillejo, está buscando en la jerarquía eclesiástica española y en El Vaticano el apoyo que no encuentra en su superior inmediato, el obispo de Córdoba, Javier Martínez. El obispo ha censurado en una nota pública a Castillejo por haberle desobedecido en varias ocasiones y por su actitud "escandalosa", especialmente por la póliza millonaria que le ha suscrito Cajasur y que le permitirá cobrar una renta vitalicia de al menos 213.000 euros anuales cuando abandone la entidad.
El asesor jurídico de Cajasur, Diego Jordano, confirmó ayer que Castillejo, acompañado por otros tres de los canónigos que están en el Consejo de Administración de Cajasur, se reunió ayer en Madrid con el nuncio del Papa en España, Manuel Monteiro de Castro. Jordano eludió precisar qué se trató en esta conversación y tampoco indicó si hubo más personas presentes en este encuentro. Según informó ayer Abc, Castillejo tenía previsto entrevistarse también con representantes de la Conferencia Episcopal española, cuyo presidente es el cardenal Antonio María Rouco Varela.
No obstante, una fuente de la Conferencia Episcopal aseguró que ayer no había ninguna reunión prevista en la sede de esta institución con Castillejo y con los otros tres patronos de Cajasur.
El asesor jurídico de la caja señaló que los otros dos canónigos que forman parte del Consejo de Administración no acudieron a Madrid por estar "enfermos" y aseguró que Castillejo estará en Roma los próximos días, aunque tampoco precisó con qué altos cargos del Vaticano se entrevistará.
Desde que se conoció el escándalo de la póliza millonaria, Castillejo ha presumido en distintos foros (en concreto ante los trabajadores y en el Consejo de Administración) de que contaba con el apoyo de los más altos mandatarios de la Iglesia, aunque públicamente Rouco Varela se limitó a afirmar que este asunto competía a los obispos andaluces, especialmente al de Córdoba.
Una fuente eclesiástica manifestó ayer su extrañeza por el hecho de que la jerarquía de la Iglesia haya recibido tan rápido a Castillejo, dos días después de que Martínez hiciese pública la nota en la que descalifica la gestión del presidente de la entidad. Martínez reprochaba a Castillejo no sólo la "escandalosa" póliza, sino los continuos actos de desobediencia y los "pactos" que ha alcanzado con el PP para que Cajasur burle la tutela de la Junta.
Esta fuente consideró que la jerarquía eclesiástica debería haber remitido a Castillejo a su superior inmediato, es decir, el obispo de Córdoba, y evitar este puenteo. "¿En concepto de qué se le recibe, como presidente de una caja de ahorros o como sacerdote?", preguntaba ayer esta fuente.
El obispo de Córdoba estuvo la semana pasada en Roma para comunicar la situación crítica que atraviesa Cajasur por la actitud de Castillejo.
Mientras, el candidato del PP a la alcaldía de Córdoba, Rafael Merino, rechazó ayer pronunciarse sobre el comunicado del obispo, aunque acusó a PSOE e IU de pretender "usurpar el poder de la entidad financiera". En rueda de prensa, Merino, que subrayó que no se mete "en el ámbito eclesiástico, sólo en el político", definió como "un gallinero" las críticas realizadas por PSOE e IU al acogimiento de Cajasur a la Ley Financiera, y les acusó de querer "usurpar el poder de la entidad financiera" y de utilizar la polémica "para distraer a la opinión pública". "Así no hablan de paro, de la falta de viviendas, del problema del tráfico o de la escasez de políticas sociales", destacó.
Merino se refirió también a la modificación de los estatutos de la caja que ha promovido Castillejo, que reducen la presencia pública en la caja e incrementan el poder de la Iglesia, y señaló que "la presencia institucional tiene que darse en los ámbitos donde se pueden resolver los problemas, no en las entidades financieras".
