"No creo que deba cambiar mi carrera por tener el Oscar"
El paso de Halle Berry por Muere otro día ha hecho de la actriz de 34 años algo más que la nueva chica Bond.La ha convertido en su igual y dispuesta a robarle un poco de fama al agente 007 ante la posibilidad de protagonizar lo que sería la primera serie derivada de la popular obra de Ian Fleming, dándole vida propia a su personaje de Jinx en próximos filmes. La idea le agrada pero Berry no se va a sentar a esperar de brazos cruzados, no ahora que tiene el Oscar en sus manos, el primero para una actriz negra, cinco proyectos en cartera y su propia productora.
Pregunta. ¿Puede describir esas similitudes que le unen a Jinx?
Respuesta. Yo también soy peleona. No es el mismo tipo de peleas que vive Jinx, pero el personaje me permitió mostrar algo de mí misma. Estoy en forma, hago pesas, aunque es cierto que tuve que prepararme en el tema del combate, especialmente a la hora de disparar un arma, algo que nunca había hecho antes y me puso muy nerviosa.
P. Es un cambio drástico del papel que le dio el Oscar por Monster's Ball al de chica Bond.
R. De hecho es lo que me gusta tanto de esta industria, que puedes ir de un extremo al otro, de Monster's Ball a James Bond o X-Men 2, y disfrutar de ambos extremos. Jinx es sexy. Me gusta lo segura que está de su sexualidad, algo que utiliza casi como un arma. También me gusta su inteligencia. Es la igual de 007 y ése es el mejor tipo de chica Bond que he visto nunca.
P. ¿Tanto como para hablar de una serie a lo James Bond pero centrada en Jinx?
R. No me han preguntado nada oficial todavía pero, honestamente, si pudiera darle una continuación a este personaje, lo aceptaría al instante.
P. ¿De dónde sacaría el tiempo? Son unos años muy activos en su carrera.
R. Todo lo que necesito es una buena agenda electrónica. Ése ha sido el mayor cambio, al menos en mi carrera, que estoy viviendo gracias al Oscar. Nunca antes había tenido cinco proyectos a la vez en mis manos. Antes era acabar algo y llamar a mi agente. Ahora tengo dos años de trabajo por delante ya seguros, y es maravilloso. Además, hay de todo: películas pequeñas, de acción, comedias románticas, de suspense. Me gusta hacer de todo y no creo que deba de pensar en mi carrera de forma diferente, ni cambiarla por tener un Oscar, como muchos otros antes de mí que tras la estatuilla caen en el olvido porque nada es lo suficientemente bueno.
P. Además está su nueva faceta de productora.
R. Sí, estoy produciendo October Squall, donde interpreto a una mujer que ha sido violada, y también estoy trabajando con Oprah Winfrey en el libro de Nora Zeale Hurston, Their Eyes Were Watching God.
P. El Oscar también la ha convertido en una especie de modelo de la igualdad racial en esta industria.
R. Algo que me hace muy feliz porque se trata de un gran paso en la dirección debida. No sé cómo transformará a la industria pero desde luego ha inyectado esperanzas a la gente de otras razas, que ahora pueden pensar que algún día les tocará a ellos. Es una buena manera de cambiar el futuro, haciendo sentir a la gente que realmente pueden ser parte de esta industria.
Babelia
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