La feria Fotoventas liga el papel al triunfo de las cámaras digitales

El papel se ha mostrado hasta ahora como un formato difícilmente sustituible. Así ha sido en el caso de las ediciones impresas de los libros frente a los digitales, por ejemplo, o con los documentos de las empresas. Con la fotografía parece que ocurrirá lo mismo. El triunfo de la cámara digital es incotestable, pero sus imágenes se seguirán copiando en papel.

"Uno de los tópicos más falsos es la idea de que la gente no querrá tocar sus fotos", asegura Juan José Lozano, responsable de mercadotecnia de Kodak. "Alguien que ha registrado una emoción, un momento, necesita verlo y tocarlo en papel, y en esta necesidad no hay diferencia entre digital y analógico".

Son muchas las incertidumbres que aún flotan en el ambiente sobre el futuro que depara la fotografía, reconocían diversos responsables del sector fotográfico en un debate la semana pasada en la feria Fotoventas Digital, celebrada en Madrid. "Todos estamos un poco confusos", admite Enric Golvé, de los laboratorios EGM.

Golvé ha apostado por las posibilidades de lo digital en su laboratorio, donde llevan dos años usando Internet como sistema de distribución de fotos digitales y medio a través del que se realiza el pago. El empresario catalán puntualiza con claridad, como el resto de sus colegas: "Hay que hacer ver al consumidor que con la cámara digital se pueden y se deben hacer copias en papel".

Sin embargo, hasta el momento, quien toma fotos digitales parece reacio a acercarse a las tiendas para revelar sus imágenes. Sólo una décima parte de las impresiones de capturas digitales se realizan en establecimientos especializados; el resto de las imágenes se imprimen principalmente en casa, y normalmente su resultado es de baja calidad, según Juan José Lozano, de Kodak.

Más copias en papel

Aún así diferentes responsables del sector están convencidos de que la gente seguirá guardando sus imágenes en papel, hayan sido tomadas con cámara digital o película tradicional; al mismo tiempo se harán registros digitales de todas las imágenes, aunque las fotos se hayan tomado con una cámara tradicional.

"El archivo digital aumenta las posibilidades de negocio ya que se pueden ofrecer mil y un servicios nuevos", reconoce Galvé. Además los dueños de máquinas digitales parecen muy dispuestos a tomar imágenes. Cámara en mano y en plena celebración o en viaje de vacaciones los datos indican que sus propietarios sacan un 70% más de fotos. Aunque pocos se acercan a imprimir sus imágenes, cuando lo hacen piden, por término medio, más copias (más de 30) que los usuarios de carretes, que revelan una media de 26.

"La tendencia hacia las cámaras digitales es imparable", asegura Jové, de Sony. Para el año que viene algunos datos indican que el número de cámaras en manos de españoles llegará a las 400.000, frente a las 180.000 que habrá a finales de este año.

Además de los debates, Fotoventas también sirvió como marco para la presentación de las últimas novedades en fotografía digital profesional. Em presas como Canon, Nikon presentaron sus últimos modelos EOS 1 DS y D100, respectivamente. Hasselblad, por su parte, presentó un nuevo modelo híbrido, el H1, al que se le pueden adaptar respaldos tanto digitales como analógicos.