Más de 50 testigos del naufragio de Banyoles acudirán a declarar ante el juez con apoyo psicológico

Un total de 57 testigos de nacionalidad francesa declararán en el juicio por caso del naufragio en el que perdieron la vida 21 personas en el lago de Banyoles hace cuatro años. La mayoría de los testigos viajaban en la embarcación llamada L'Oca el fatídico 8 de octubre de 1998 cuando ocurrieron los hechos y es probable que durante su declaración ante el juez se produzcan momentos de emoción.

El Departamento de Justicia de la Generalitat ha previsto que los ancianos, en su mayoría de edades superiores a 70 años y algunos con enfermedades crónicas, dispongan de apoyo psicológico para ayudarles a hacer frente a la tensión de su declaración. Un grupo de psicólogos se unirá al grupo en la localidad francesa de Perpiñán y les acompañarán durante su estancia en Girona. A pesar de que la lista de testigos que podrían haber acudido al juicio era de 154 personas, al final únicamente 57 han anunciado que comparecerán en la sala habilitada en Girona para celebrar el juicio.

Llegada escalonada

Los jubilados franceses se desplazarán a Girona en cuatro grupos, el primero de los cuales, integrado por 12 personas, empezará a declarar el próximo miércoles día 20. Los restantes grupos, de 18, 14 y 13 personas, lo harán los días 25, 26 y 27.

El Departamento de Justicia, que dirige Núria de Gispert, les paga el viaje y el alojamiento en el hotel Fornells Park, de cuatro estrellas, durante la noche anterior y la siguiente a su declaración.

Los jubilados franceses, descontando a un reducido grupo que seguirá otro trayecto, llegarán a Perpiñán en avión el día anterior al de su declaración. Un microbús les trasladará inmediatamente a Girona.

Es probable que el testimonio de los jubilados, a pesar de su emotividad, resulte reiterativo a la hora de esclarecer responsabilidades en el naufragio, afirman fuentes próximas al caso. En este sentido, el delegado del Departamento de Justicia de Girona, Joaquim Asso, explicó que la declaración constituye "un derecho" y también una voluntad" expresada por ellos. A no ser que renuncien en el último momento, todos podrán responder a las preguntas de la sala. Al respecto, Bruno Guyón, portavoz de una asociación de víctimas que representa a una veintena de afectados, explicó que la declaración en el juicio constituye para muchos una manera de cerrar el duelo y las heridas que han permanecido abiertas durante cuatro años.

El delegado del Departamento de Justicia, que ha venido siguiendo el juicio en Girona, se mostró muy crítico con las declaraciones exculpatorias efectuadas hasta el momento por los responsables municipales de Banyoles en el momento del naufragio, aunque está convencido de que se hará justicia. El delegado siempre ha mantenido que alguna Administración debe responder por el trágico naufragio.