Cerca de 400 pisos y un hotel se levantarán en la antigua estación de Cercanías

Barcelona empezó a dibujar proyectos para el terreno de la antigua estación de Cercanías hace más de 11 años. Pero ninguno de ellos consiguió salir adelante. Ayer, en cambio, hubo unanimidad de todos los grupos municipales para aprobar inicialmente un plan especial que, además de resolver la ubicación de la biblioteca provincial, supondrá la construcción de unas 400 viviendas -el 40% de ellas de protección oficial- y un hotel.

A juzgar por la comisión de Urbanismo del Ayuntamiento de Barcelona podría decirse que gran parte de los proyectos de futuro de la ciudad están ligados a Renfe. Además del Plan de Cercanías, también se aprobó ayer inicialmente la modificación del Plan General Metropolitano para la reordenación de la estación de Sants y su entorno, y el parque y la futura estación de la Sagrera. En los tres proyectos, Renfe obtiene unos pingües beneficios ya que podrá construir hoteles, oficinas y viviendas. Ese es, en cierto modo, el precio que la ciudad pagará para lograr algunos objetivos considerados estratégicos, como la estación de la Sagrera.

El proyecto aprobado ayer es fruto del acuerdo entre el Ayuntamiento de Barcelona, Renfe -como propietaria de los terrenos ferroviarios- y la sociedad Tricéfalo, constituida por la misma Renfe así como por las promotoras Vallehermoso y Metrovacesa.

El plan especial de Renfe-Cercanías comprende dos importantes franjas de terreno. Una, de 18.000 metros cuadrados, que ocupó hasta el año 1989 la estación de Cercanías. Esa pastilla, actualmente destinada a aparcamiento, generará unos 40.000 metros cuadrados que se destinarán a construcción de vivienda. Es decir, unos 400 pisos.

De acuerdo con el plan, el 60% de ellos estará en el mercado libre y el 40% restante será de protección. En principio, la mayor parte de los pisos sociales se destinarán a realojar a los residentes de la Barceloneta que se verán afectados por los proyectos que supondrán el fin de las viviendas conocidas como los quarts de casa. La sustitución de esas reducidas viviendas dependía, en buena parte, de la obtención de suelo para construir los pisos de quienes deberán ser realojados. 'Ahora ya sabemos que en un plazo de tres años eso ya podrá ser una realidad', comentaba con satisfacción Xavier Casas, primer teniente de alcalde del Ayuntamiento de Barcelona.

Un plan en dos fases

La otra gran pastilla del plan la conforman los aproximadamente 5.000 metros cuadrados del solar que ocuparán la biblioteca y otro equipamiento que ya se determinará junto al paseo de la Circumval.lació. La zona verde que generará estará a continuación de la biblioteca, en paralelo con dicho paseo. Serán unos 10.000 metros cuadrados que actualmente ocupan vías secundarias de la estación de Francia. Al otro extremo, casi en la intersección del citado paseo con la calle de Wellington -donde estuvo situado un globo cautivo en los últimos meses- se alzará un hotel con una superficie prevista de 23.000 metros cuadrados.

El plan se ejecutará en dos fases. Una inmediata con la biblioteca, las viviendas y parte de la zona verde, en un plazo de tres años. La segunda, el hotel y la otra parte de la zona verde, tendrá que esperar a la desafectación ferroviaria. Es decir, a que se pueda anular buena parte de las vías, lo que se sitúa en torno al año 2006. Esa será también la fecha en la que la ciudad afrontará el desmantelamiento de la estación de Francia -reformada para los Juegos Olímpicos- como tal ya que dejará de ser de uso ferroviario.

Pocas veces un plan urbanístico de importancia consigue el pronunciamiento favorable de todas las fuerzas políticas, tanto del equipo de gobierno como de la oposición. Ayer fue una de esas excepciones en las que CiU y el PP estuvieron de acuerdo en las líneas generales del proyecto: 'Supone una buena solución para posibilitar la construcción de la biblioteca, que tiene una asignación presupuestaria comprometida por el Ministerio de Cultura, por lo que no conviene perder el tiempo', señaló el presidente del grupo nacionalista, Joan Puigdollers. A juicio de Jordi Cornet, portavoz del Partido Popular, también se trata de un buen plan. No obstante, en relación con el solar de la biblioteca, Cornet dudó de que en el subsuelo no haya restos arqueológicos: 'Nuestras informaciones apuntan a la posibilidad de que existan los baluartes de la antigua ciudadela'. Precisamente fue el hallazgo de restos arqueológicos importantes lo que impidió la construcción de la biblioteca en el primer emplazamiento elegido, el antiguo mercado del Born.

La misma comisión dio el visto bueno a la modificación del Plan General Metropolitano de reforma de las estaciones de la Sagrera y Sants y su entorno. En ambos casos, se trata del primer paso urbanístico para la profunda reforma que afrontarán esas dos áreas en los próximos años, ambas ligadas a la llegada del AVE a Barcelona.

En el caso de Sants, se plantea una ampliación de la caja de la estación, que albergará la estación de autobuses en una de las plantas subterráneas. En la Sagrera, el plan especial que ahora se elaborará recogerá el proyecto propio de la estación y del futuro parque.