Cuatro excelentes para una colección

Hoy comienza la entrega de la colección de reproducciones de monedas históricas, que EL PAÍS adjuntará a los ejemplares que se adquieran el lunes, martes y miércoles con la entrega de 1.5 euros. Estas 40 reproducciones están acuñadas en metal con baño de oro y plata puros por la Fábrica Nacional de Moneda y Timbre. La reproducción de los 4 excelentes de los Reyes Católicos se entrega hoy gratis, junto con el cuadernillo que explica la colección y que incluye dos estuches para guardar las reproducciones.

En el anverso de los 4 excelentes aparecen los perfiles enfrentados de ambos reyes y en el reverso, su escudo con el águila de san Juan y la leyenda en latín: 'Bajo la sombra de tus alas protectoras'.

Se llamaban excelentes por su alto contenido en oro, por lo que adquirieron gran prestigo internacional, lo que llevó a que circularan más por el extranjero que por los propios reinos hispánicos. Fueron de gran utilidad propagandística política para los monarcas, que habían unido sus reinos gracias a la boda que celebraron el 19 de octubre de 1469 cuando todavía eran príncipes. El valor de una de estas monedas de aquella época está por los 60.000 euros (unos diez millones de pesetas). Se empleaban entonces para las grandes transacciones comerciales o pagos. La gente de la calle no las veía, pues se empleaba el trueque y otras monedas de menor valor para los productos en los mercados populares.

Los 8 escudos de Carlos III, que se entregarán mañana con EL PAÍS, se acuñaron en 1760 a poco de su subida al trono de España -antes había ocupado el de Nápoles y Sicilia-. En el anverso aparece su efigie y condición de rey de España y las Indias. En la otra cara se puede leer 'In utroq. felix auspice Deo' ('En uno y otro mundo, felices bajo la mirada de Dios'), en alusión a los reinos americanos. Junto a esa frase figuran las letras J y P, iniciales de Juan Rodríguez y Pedro Cano, los ensayadores o funcionarios delante de los cuales se verificaba el peso de la moneda y la calidad del metal. En esta época se crea la figura del grabador general, que para esta ocasión fue Tomás Francisco Prieto. El valor de la moneda original entre los coleccionistas es de unos 31.500 euros.

Las 5 pesetas de plata de Fernando VII, que se entregará este martes, se acuñaron en Gerona (denominación que aparece en el reverso) en 1809, en plena guerra de España contra las tropas napoleónicas y estando la ciudad sitiada por los soldados franceses. La ciudad catalana se había sublevado contra los invasores el 5 de junio de 1808 y fue sitiada al año siguiente, mandando la fuerza española el general Álvarez de Castro. El hecho histórico es recordado en uno de los Episodios Nacionales de Benito Pérez Galdós.

Durante el asedio se acuñaron dos tipos de monedas, una de un duro (así figura) que no tenía el busto del rey, y es de peor calidad; la otra de 5 pesetas en el que sí aparecía con figura de emperador romano. El valor de la moneda original es de 60.000 euros. Está acuñada en plata y para ello se dispuso de ese metal procedente de las custodias, candelabros y otros objetos litúrgicos de las iglesias, también de donaciones voluntarias y requisas.

Todo esto sucedía mientras el rey Felón, es decir, Fernando VII, estaba confinado en Francia y había abdicado a petición de Napoleón. Éste había impuesto como rey a su hermano más pequeño, José, que sólo fue reconocido por una ínfima parte de la nobleza y tenía la enemiga de todo el pueblo español. Se le conoce como el rey intruso. En 1810 emitió 320 reales de oro. El perfil de José Napoleón (también con aires romanos) mira hacia el lado izquierdo, para distinguirse de que los borbones y los austrias que lo hacen al lado contrario, y reproduce la alusión carolina a los dos mundos 'felices'.

El pueblo llano rechazaba esta moneda por su condición de 'intrusa' y porque el material utilizado provenía del expolio de una custodia eclesiástica de oro macizo. Su valor es de 12.000 euros.