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Reportaje:

Los alemanes conquistan Tolosa

El coro Kammerchor Saarbrücken gana el gran premio del certamen guipuzcoano

Maribel Marín Yarza

El Kammerchor Saarbrücken de Alemania, dirigido por Georg Grün, no es un coro profesional. Sus 35 integrantes, médicos, profesores, estudiantes,... ni siquiera se reúnen semanalmente para afinar sus voces. Pero su pasión por la música les hace crecerse en el escenario. Ayer, se convirtieron en los grandes vencedores del 34º Certamen Coral de Tolosa. La agrupación no sólo logró el máximo galardón y con él la nominación para participar en el Gran Premio Europeo de Canto Coral que se celebrará en Tours (Francia) en junio de 2003. También se proclamó vencedora en los dos apartados de voces mixtas: folclore y polifonía.

La coral, fundada por Grün en 1990, domina un repertorio que abarca desde la Edad Media y el Renacimiento hasta la contemporaneidad. Gracias a él, ha cosechado importantes galardones corales en certámenes de Budapest (1993), Arezzo (1996) o Regensburg (1999). Pero lo suyo no es el folclore. Así lo reconoce Kepa Martínez de Albéniz, un tolosarra miembro del Kammerchor Saarbrücken. 'La verdad es que no lo llevan tan dentro como los coros de los países nórdicos. Conseguir este galardón ha sido una sorpresa', confiesa.

Martínez de Albéniz ha tenido un trabajo extra en su vuelta a casa: ayudar a sus compañeros a atinar en la interpretación de las obras obligatorias en euskera. 'No fue difícil', asegura el director. 'Estamos acostumbrados a cantar en diferentes lenguas aunque no las conozcamos'.

Dice Grün que la clave del éxito del coro es la mezcla de las voces y la personalidad de los cantantes. Para Martínez de Albéniz, la profesionalidad de los cantores, aun siendo amateurs. Sea como sea, el coro alemán se metió al jurado en el bolsillo.

No fue el único galardonado. Vocalia, de Vitoria, logró el Premio a la mejor interpretación de una obra vasca, por Ohiu hau, de David Azurza y el primer puesto en polifonía de voces iguales; The Netherlands Youth Choir, el puesto de honor en música profana; el Ginnungagap (Noruega), se proclamó vencedor en música sacra y el Children Choir of Klaipeda (Lituania) ganó en coros infantiles. El Puellae (Hungria), en folclore de voces iguales, y el Vdchovenije (Rusia), que se llevó el premio del público, completan las primeras plazas del palmarés.

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