Un joven católico es crucificado en un poste en Irlanda del Norte
Un joven católico fue hospitalizado ayer tras haber sido literalmente crucificado en un poste por una banda de jóvenes durante la noche del viernes en una zona de mayoría protestante de la periferia de Belfast, según informó la policía. Harry McCartan, de 23 años, fue encontrado por los bomberos, medio inconsciente y con las manos clavadas a una valla de madera. El joven tenía también heridas en las piernas, ya que sus agresores le golpearon con un objeto contundente antes de clavarlo a la valla. Este tipo de violencia es característico de los grupos protestantes, según declaró la policía.
Los cirujanos están intentando salvar las manos del joven, perforadas por clavos de 15 centímetros de longitud. La víctima, según la policía, fue agredida por una banda de jóvenes cuando intentaba robar un coche en el barrio de Seymour Hill, un enclave protestante de la localidad de Dunmurry, a 22 kilómetros al sur de Belfast. 'Los bomberos tuvieron que cortar el poste por arriba y por abajo antes de quitarle los clavos de las manos para poder llevarlo al hospital', dijo a Reuters un portavoz policial.
La tensión entre católicos y protestantes no ha dejado de crecer en Irlanda del Norte en los últimos meses, mientras los políticos tratan de salvar el proceso de paz iniciado en 1998, puesto permanentemente en cuestión. Además de la negativa del IRA (la organización terrorista católica del Ulster) a mantener nuevos contactos para negociar su desarme, la organización ha sido acusada de espiar a partidos políticos. A raíz de esta situación, el primer ministro británico, Tony Blair, decidió hace una semana suspender la autonomía de la región.
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