El gigante alemán llega tambaleante
El Bayern presumía de la mejor plantilla de su historia y hoy corre riesgo de quedar fuera en Riazor
En cualquier circunstancia, la Copa de Europa empieza siempre con al menos dos favoritos fijos: el Madrid, por supuesto, y tras él, el Bayern de Múnich. Pero el gigante alemán está a punto de desplomarse con la carrera recién iniciada. El mejor Bayern de la historia, como se jactaban sus dirigentes al arrancar la temporada, puede hacerse trizas en sólo dos meses. Tanta es la tensión en el club bávaro que hasta el liderato de la Bundesliga se vive como una anécdota ante el fracaso en la Liga de Campeones, donde no ha sumado más que un punto tras cuatro jornadas. Al Bayern sólo le sirve un triunfo esta noche en Riazor frente al Deportivo (20,45, TVE-1), y aun así dependería de otros resultados para alcanzar el milagro en el partido final de la primera fase. Un choque de la máxima tensión entre dos equipos hermanados por los graves problemas que los aquejan.
Tras perder la pasada semana en Milán (2-1) y quedar a un paso de la eliminación, alguien preguntó a uno de los máximos dirigentes del Bayern, el ex futbolista Uli Hoeness, cómo era posible que el equipo hubiese caído tan bajo. 'Todo se reduce a un sólo partido, nuestro choque en casa contra el Deportivo', respondió Hoeness. 'Esa derrota nos causó un gran daño'. Los datos avalan esa interpretación. Hasta que se cruzó con el conjunto de Javier Irureta, el Bayern permanecía invicto tras siete partidos disputados en las diferentes competiciones. Desde entonces, acumula cuatro derrotas en nueve encuentros. Cuando el Deportivo llegó a Múnich, Ballack, el gran fichaje de la temporada, ya había marcado cuatro goles y todo el mundo le señalaba como el sucesor de Beckenbauer. Tras el golpe de mano del Depor en el estadio Olímpico (2-3), Ballack sólo ha marcado un tanto en nueve partidos y le empiezan a pitar los oídos por las críticas recibidas. 'Parecía una sombra cansada', sentenció la propia página web del Bayern al comentar su actuación en la última jornada de la Bundesliga.
El despedazamiento del Bayern a raíz de aquella dolorosa derrota entra en el ámbito de lo racional. Pero lo que le ocurrió al Deportivo después de haber logrado un hito histórico -nunca un equipo español había vencido en Múnich- es más bien asunto de meigas. Al siguiente partido, cayó lesionado Valerón. Unos días más tarde, se le detectó un tumor a Molina. Y desde entonces, el Depor es en un conjunto casi tan atribulado y lleno de aprensiones como su adversario de esta noche.
Oliver Kahn es baja
Puestos a comparar, la situación del Bayern se antoja algo peor, y no sólo porque el Deportivo tenga más posibilidades de seguir adelante (ni siquiera una derrota le dejaría descartado). 'Somos ingenuos', se lamentó hace unos días el entrenador del cuadro bávaro, Ottmar Hitzfeld. De un equipo alemán, y más tratándose del Bayern, podría esperarse cualquier cosa excepto la ingenuidad. El técnico se refería a la cuantiosa cosecha de goles en contra, que alcanzó su punto más bochornoso el sábado último en el Olímpico, donde el Bayern empató (3-3) frente al recién ascendido Hannover. A las calamidades de la defensa se ha unido la lesión de Oliver Kahn, algo más que un simple portero. Le sustituirá Wessel, un chico de 23 años que ya flaqueó ostensiblemente en el choque ante el Hannover. Tras caer lesionado, el comportamiento de Kahn, un capo del vestuario, ha contribuido a que el ambiente siga enturbiándose. Además de arremeter contra el juego de sus compañeros, el considerado mejor portero del mundo se dio el fin de semana a la vida nocturna, lo que le acarreará una sanción del club. Para completar el sombrío panorama, el Bayern podría comparecer en Riazor cojo de su costado derecho por la lesión de Hargreaves y las molestias de Sagnol y Salihamidzic, los tres futbolistas que suelen repartirse esa banda.
El Depor, en el que siguen faltando piezas básicas, tampoco está para grandes alegrías, pero la victoria del sábado en Vallecas (1-2) ha sido un alivio a sus tribulaciones. 'La situación anímica es mejor. Hemos reforzado la autoestima', explicó ayer Irureta, ya sin la pesadumbre que la causó la última derrota en Lens. De momento, la mejor noticia es que se ha acabado la búsqueda de un recambio provisional para Valerón. Sin necesidad de grandes alardes, Fran mostró en Vallecas y en la primera parte de Lens que con él en la media punta el equipo recupera la calma y la seguridad en el manejo de la pelota, virtudes indispensables para despejar hoy el futuro europeo del Depor y dar el golpe de gracia al tambaleante coloso alemán.
DEPORTIVO: Juanmi; Scaloni, César, Naybet, Romero; Sergio, Mauro Silva; Víctor, Fran, Capdevila; y Makaay.
BAYERN: Wessel; Thiam, R. Kovac, Kuffour, Lizarazu; Scholl, Jeremies, Ballack, Ze Roberto; Pizarro y Elber.
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