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Reportaje:AMÉRICA LATINA

México teme al comercio chino

La reunión de la APEC pone al descubierto la potencia asiática tras su ingreso en la OMC

Juan Jesús Aznárez

Los empresarios que han asistido a la X Reunión Cumbre de la APEC, el Foro Económico Asia-Pacífico, celebrada en la Baja California Sur, principalmente los mexicanos, han expresado fuertes recelos sobre la competencia que puede suponer China tras su ingreso en la Organización Mundial del Comercio (OMC). En las reuniones de las 21 naciones del grupo, representadas por jefes de Estado o de Gobierno y ministros, la competencia china y los subsidios agrícolas han centrado la mayoría de los debates.

Las 21 naciones del grupo, representadas por jefes de Estado o de Gobierno y ministros, concentran el 52% del PIB mundial
Mientras el país azteca ha reducido sus exportaciones a Estados Unidos un 4,4% por la recesión, China las ha aumentado un 4,2%

China causa un temor exagerado entre los países competidores del Foro Económico Asia-Pacífico (APEC, por sus siglas en inglés) porque, desde su ingreso en la Organización Mundial de Comercio (OMC), el gigante asiático deberá respetar las reglas observadas por los demás países miembros. La valoración y convocatoria a la calma fueron efectuadas por el ministro de Economía de México, Luis Derbez, después de que grupos empresariales asistentes a la X Reunión Cumbre de la APEC de Los Cabos (Baja California Sur), principalmente mexicanos, comunicaran sus recelos sobre la competencia desleal atribuida a los chinos.

Las 21 naciones del grupo, representadas por jefes de Estado o de Gobierno y ministros, concentran el 52% del producto interior bruto (PIB) mundial y desarrollaron una semana de reuniones en el noroeste mexicano, que concluyen hoy.

Abordaron la negativa influencia del terrorismo en el comercio internacional, y el cumplimiento de las metas perfiladas en anteriores reuniones. Una de ellas está contenida en la llamada agenda de Doha, acordada en la cita de la OMC en Qatar, el pasado año: un acuerdo global sobre los subsidios antes del año 2005. Los otorgados por Estados Unidos y la Unión Europea y Japón a sus sectores agrícolas constituyeron uno de los temas principales.

La competencia arrocera

Era inevitable que así fuera porque Estados Unidos los aumentó en un 67%. La feroz competencia de sus arroceros hundió la producción mexicana. El objetivo es 'la progresiva eliminación de los subsidios a la exportación en todas sus formas', dijo en Los Cabos el director de Política Comercial de la cancillería chilena, Ricardo Lagos Weber. También lo es la progresiva eliminación de las barreras arancelarias en el año 2010 para los países desarrollados y en el 2020, para el resto.

El foro que trabaja para posibilitar su cumplimiento fue constituido en 1989, como respuesta a la creciente interdependencia regional. Lo integran Australia, Brunei, Canadá, Chile, China, Hong Kong, Indonesia, Japón, Corea, Malasia, México, Nueva Zelanda, Papua Nueva Guinea, Perú, Filipinas, Rusia, Singapur, Taiwan, Tailandia, Estados Unidos y Vietnam. Su carácter difiere del reconocido a la Organización Mundial de Comercio, que impone un concepto de reciprocidad al impedir que un miembro reduzca sus tarifas si otro no está de acuerdo en hacer lo mismo.

La esencia de la APEC, cuyos países son habitados por 2.400 millones de personas, es la cooperación voluntaria. 'Nos esforzamos para hacer de ella un efectivo y eficiente proceso', declaró Alejandro Peña, director ejecutivo de la APEC. La organización no es un foro de negociación sino de discusión y trabaja por consenso, y persigue la liberalización comercial y la cooperación económica.

Uno de los marcos de acción aprobados por los ministros de Comercio, en una reunión previa, fue tratar de acortar en un 5% los costos de las transacciones comerciales en la región para el año 2006. De conseguirse, según el centro de estudios del foro, el PIB regional subiría un 1%. Las cifras son cuantiosas. El volumen de exportaciones dentro de la APEC supera los 900.000 millones de dólares anuales, y el 83% recala en países asiáticos, y el 17% restante en América. 'La prioridad es alcanzar la liberalización comercial en áreas donde existan los mayores beneficios posibles para el mayor número posible de personas', según el informe del Consejo de Negocios de la APEC.

La pretensión es ampliar el acceso a otros mercados, permitiendo que las economías más débiles tengan un ritmo de apertura más lento, eliminar los subsidios a la exportación de productos agrícolas y reducir tarifas en manufacturas. Los compromisos adquiridos serán supervisados el próximo año en Tailandia, y por Chile en el año 2004. 'El propósito común es hacer que los beneficios de la cooperación económica lleguen realmente a las pymes', dijo Gerardo Traslosheros, funcionario mexicano de Economía. Se trata de 'promover su papel como promotores del desarrollo económico, la creación de empleo y el alivio de la pobreza'.

El grueso del contrabando

Las prácticas chinas fueron objeto de especial discusión en Los Cabos porque sus competidores sospechan que puede sumar a los beneficios de su ingreso en la Organización Mundial de Comercio (OMC), y de su mano de obra más barata, la continuidad de la competencia desleal. China produce el grueso del contrabando que inunda las grandes ciudades mexicanas, desde escobas a juguetes.

'México debe asegurar que le abran los mercados en Asia y definir muy bien las reglas del juego del comercio internacional con China', según Lorenzo Zambrano, presidente de la paralela Cumbre de Directores de Empresas. 'China no puede tolerar la triangulación de mercancías'.

Las exportaciones de México y China, empatadas en 1980, en 18.000 millones de dólares, según datos de la OMC, crecieron en proporción desigual. Durante el pasado año, a siete años de la entrada en vigor del Tratado de Libre Comercio entre Estados Unidos, México y Canadá, las exportaciones chinas fueron un 68% más que las mexicanas y sin la ayuda de tratados comerciales con Occidente.

Como consecuencia de la recesión de Estados Unidos, a cuyos mercados México envía más del 85% de sus mercancías, el país azteca perdió un 4,4% del total de envíos, y China aumentó un 4,2% sus ventas en el mismo destino.

Pero la metrópoli de Asia no sólo juega con la ventaja de su mano de obra barata. Sus dos decenios de reformas, sus eficaces políticas de Estado, sus bajos aranceles y períodos de gracia accesibles, atraen inversiones de pequeñas y medianas empresas, según la presidenta de la Cámara Nacional de la Industria de la Transformación (Canacintra), Yeidckol Polevnsky.

Puerta de entrada

México ofrece una puerta de entrada a los apetecibles mercados norteamericanos, pero la ausencia de las reformas estructurales necesarias puede ahuyentar inversiones, advirtió Javier Prieto, representante mexicano en el Consejo Consultivo de Negocios (ABAC) de la APEC. 'Sin ellas difícilmente la gente va a pensar en México y estaría pensando en economías como China o Rusia'. Rusia buscó en la reunión mexicana el apoyo de la APEC para entrar en la OMC.

'Es la primera vez en la historia de la humanidad que un país del tamaño de China ha cambiado de manera tan fundamental en un período tan breve', afirmó Siva Yam, presidente de la Cámara de Comercio Sino-Estadounidense. 'Se ha convertido en la superpotencia mundial de manufactura'. Su crecimiento anual promedio ha superado el 7% y sus 1.300 millones de habitantes son voraces consumidores, aunque con escaso poder adquisitivo. Pero el camino chino hacia la primacía es largo. 'Somos un país en desarrollo', todavía estamos aprendiendo. Tenemos los mismos sentimientos que otros países en desarrollo. Necesitamos asistencia', subrayó Li Baodong, jefe de la representación china en la APEC.

Los ministros de Comercio intentarán concluir las conversaciones de la Agenda de Doha de acuerdo con la fecha límite prevista: enero de 2005. Las modalidades de las negociaciones sobre bienes no agrícolas deberán establecerse antes del 30 de abril de 2003.

El presidente anfitrión, Vicente Fox, dijo en un almuerzo con periodistas que el objetivo principal de la APEC debe ser 'combatir la pobreza, incluir los grupos vulnerables en el desarrollo, mejorar la calidad de vida de las familias y los pueblos en nuestros países'. La realidad entre bastidores es de otro tenor: Japón acusó a Estados Unidos de utilizar tarifas para proteger la industria de acero estadounidense, y Estados Unidos pidió a Japón retirar las barretas al comercio electrónico y aliviar las regulaciones sobre las telecomunicaciones.

Un puente entre América y Asia

Representantes de los países miembros y de importantes consorcios empresariales, compartieron durante las reuniones desarrolladas en el Foro experiencias sobre distintos modelos de desarrollo políticos, sociales y tecnológicos y su incidencia social. Asimismo, mantuvieron contactos con funcionarios y autoridades de la Organización Mundial de Comercio (OMC), Naciones Unidas, el Fondo Monetario Internacional (FMI), Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y Banco Asiático de Desarrollo. El norte de los encuentros fue ceder al sector privado su carácter de fuerza motriz de las economías en un mundo globalizado.

Los ministros y presidentes coincidieron en la necesidad de arbitrar políticas apropiadas en materia de comercio, inversión y finanzas, susceptibles de abrir paso al crecimiento sostenido y obtener ventajas de la nueva economía, de inevitable enunciado en todas las cumbres.

Otros propósitos manifestados a lo largo del desarrollo de las sesiones fueron la promoción de las pequeñas y medianas empresas, la intensificación de esfuerzos para difundir los beneficios de la globalización, y la transparencia en la evaluación de las medidas que los miembros de la APEC implementen en asuntos de liberalización comercial e inversión.

El foro exhortó a otros miembros de la Organización Mundial de Comercio a unirse a este acuerdo. Los países miembros ratificaron su teórico rechazo al uso del proteccionismo y su adhesión a las reglas multilaterales de comercio.

'Esperamos que esta reunión se convierta en un puente entre América y Asia', dijo el ministro de Economía mexicano, Luis Ernesto Derbez, en una cena con periodistas.

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