El director del FIT destaca la 'salud plena del teatro atlántico'

El director del Festival Iberoamericano de Teatro (FIT) de Cádiz, José Bablé, hacía ayer un balance 'necesariamente positivo' de su XVII edición, recién concluida. 'Se han cumplido todas las previsiones según los gustos del público y la familia teatral, y cada año nos equivocamos en un menor porcentaje. Como siempre, sólo esperamos que el tiempo nos vaya dando la razón', declaró.

Tras 10 jornadas en las que intervinieron más de 20 compañías procedentes de todos los rincones de España e Iberoamérica, los responsables de esta cita anual consideran que el FIT refleja la 'salud plena del teatro atlántico, que es lo heterogéneo frente a la homogeneidad del teatro europeo'. 'Un teatro en alza que, sin olvidar sus raíces, está siendo capaz de vencer todos los tópicos y complejos. Cuando el espectador europeo aparque sus parámetros culturales, empezará a valorarlo en su justa dimensión', añadió Bablé.

Aunque los fantasmas económicos que el festival viene arrastrando desde sus orígenes no han sido aún conjurados, Bablé es optimista al afirmar: 'Con el mismo presupuesto que teníamos en el año 1991, algo más de 100 millones de pesetas, y con todos los problemas heredados, estamos logrando dar la mayor cabida posible a la escena latinoamericana dejando a un lado criterios subjetivos y haciendo una apuesta decidida por la calidad. En este sentido, pedimos al público que entienda que el festival, como los tiempos, ha cambiado. Hay que hacer memoria histórica para valorar los esfuerzos que hacemos'.

Cara a la edición del próximo año, se confirma que no habrá ediciones monográficas a corto plazo, 'salvo petición firme por parte de algún país', según comentó Bablé. Tras el balance de este año, el equipo organizador del FIT de Cádiz volverá a viajar en busca de las propuestas más interesantes o adecuadas de la escena latinoamericana. 'A menudo, pasan tres o cuatro años hasta que podemos traer los espectáculos que queremos, porque afortunadamente tienen la agenda llena', apostilló Bablé.