Unos 'narcos' asesinan a dos `camellos' y sepultan los cadáveres en un chalé

Trágico final para un secuestro ocurrido en el hampa. La pareja de supuestos narcotraficantes formada por Emiliana Fernández Garrido, de 41 años, y por Carlos José Lapa Amancio, de 30, fue hallada ayer por la mañana muerta y enterrada en un chalé de la localidad toledana de El Casar de Escalona. Ambos habían sido secuestrados el pasado jueves 18 de octubre en la capital por una banda de narcotraficantes a la que adeudaban dinero por droga. La policía ha arrestado a los 12 integrantes de este grupo mafioso, de los que siete han pasado a disposición judicial. La investigación continúa abierta.

La noticia del secuestro se conoció el mismo día 18, cuando la pareja desapareció de sus lugares habituales. Los secuestradores contactaron el viernes 19 con personas próximas a los secuestrados y solicitaron la entrega de 300.000 euros como pago de una cantidad de droga entregada antes por la organización y que no había sido abonada supuestamente por los rehenes.

Los secuestradores concertaron una cita para el sábado en la boca del metro de Canillejas con las personas que debían hacerles entrega del dinero requerido. Cuando éstas estaban a punto de llegar a esa estación, los secuestradores les indicaron que se fueran a la de Arturo Soria. Al lugar acudió una persona de aspecto suramericano en un Peugeot 406 que contactó con la persona encargada de entregar la cantidad pactada. Pero, tras una breve conversación entre ambos, cada una se fue por su lado sin hacer el intercambio del dinero.

Los agentes encargados de la investigación, pertenecientes al grupo XII de la Brigada Judicial, detectaron un turismo de la marca Lancia en los alrededores del punto de encuentro. Los policías siguieron a ese coche hasta la localidad toledana de Talavera de la Reina. Sus dos ocupantes pernoctaron allí y después regresaron a un domicilio de la calle de Luis Ruiz (Ciudad Lineal), en Madrid. Pero, al cabo de un rato, se marcharon a dormir a un piso del número 49 de la calle de Castillo de Uclés (San Blas).

Mientras, la policía seguía sin noticias de la pareja secuestrada -Emiliana Fernández Garrido y Carlos José Lapa Amancio- y los secuestradores no se ponían en contacto con las personas próximas a ambos.

Los policías vigilaron durante los días siguientes a los dos ocupantes del automóvil Lancia y lograron identificar al resto del grupo. La organización tenía como piso de seguridad un chalé situado en la calle de la Alondra, número 30, del municipio de El Casar de Escalona. Éste, que tenía apariencia de estar abandonado, había sido alquilado a un vecino de la localidad. Allí fue identificado Pascuale D., un italiano de 41 años.

Traspaso de bolsas

Otros agentes del Grupo XII comprobaron que los conductores del Lancia hablaban con el ocupante de un BMW. Sobre las 13.30 del pasado jueves, traspasaron unas bolsas de un vehículo a otro en la calle del Golfo de Salónica (Ciudad Lineal). En ese momento los policías detuvieron a cinco personas: además de Pascuale D., estaban los españoles Juan R. V., de 33 años; Francisca O. P., de 42, y Eva D. B., de 20 años, junto al colombiano Jairo L. A., de 37. En el BMW los agentes hallaron 20 kilos de cocaína y 6.000 euros ocultos mediante un ingenioso sistema de apertura en el respaldo trasero.Los policías registraron el resto de domicilios de la banda, tras conseguir el correspondiente mandamiento judicial. En el de Castillo de Uclés intervinieron 12.000 euros y medio kilo de joyas. Le siguió el de la calle de Luis Ruiz, donde los investigadores se incautaron de tres kilos de joyas y seis plumas estilográficas marca MontBlanc, cuyo valor ronda los 10.000 euros. Aquí fueron arrestados los colombianos María Melfi V. P., de 37 años, y su sobrino Jhon William V. M., de 25. La mayoría de las joyas tenían aún las etiquetas con los precios, por lo que la policía investiga en qué establecimientos fueron robadas.

El chalé de El Casar fue registrado ayer por la mañana. A unos 50 metros de la vivienda fueron hallados enterrados los cadáveres de Emiliana Fernández Garrido y Carlos José Lapa Amancio. Ambos estaban maniatados, amordazados y con los ojos vendados. Para su exhumación fue necesaria la utilización de una excavadora, ya que los cadáveres estaban a más de dos metros de profundidad. Al lugar también se desplazaron agentes del Grupo X de Homicidios y de la sección de Estupefacientes de la Jefatura de Policía de Madrid.

Los cadáveres fueron trasladados al Instituto Anatómico Forense de Toledo, donde hoy se les practicará la autopsia. Ésta determinará el día en que fueron asesinados y el arma que utilizaron sus homicidas.

En el chalé también fueron halladas dos pistolas: una de aire comprimido y la otra una Walter de 9 milímetros Parabellum. Esta última está siendo estudiada para determinar si fue utilizada en algún homicidio.