Medio Ambiente protege los fondos y la isla de Alborán como Paraje Natural

El Gobierno andaluz dio luz verde ayer al proyecto de ley de declaración del Paraje Natural de Alborán, que ahora será remitido al Parlamento para su aprobación. La consejera de Medio Ambiente, Fuensanta Coves, destacó la 'estratégica' situación geográfica de Alborán, la isla más grande de la Comunidad Andaluza situada a cinco kilómetros de la costa, y su gran 'biodiversidad'. Del futuro paraje destacan sus fondos marinos.

El islote de Alborán, que tiene 7,1 hectáreas y está adscrito al término municipal de Almería, está casi a medio camino entre Europa y África, pero también se encuentra a caballo entre las corrientes atlánticas y las mediterráneas, lo que le confiere unas características singulares al medio marino, además de ser ruta de paso en las migraciones de numerosas especies de cetáceos. Este hecho explica que la superficie que se protegerá como nuevo Paraje Natural abarque en total 264 kilómetros cuadrados, de los que sólo una pequeña parte son terrestres (la isla de Alborán y el islote de La Nube).

Después de la aprobación en el Consejo de Gobierno de ayer del proyecto de ley para su declaración, Fuensanta Coves recordó que la figura del Paraje Natural no se había utilizado para proteger un espacio desde 1989. Con esta declaración se ponen en marcha medidas de protección que serán compatibles con actividades tradicionales, como la pesca artesanal de palangre, cerco y arrastre, además del uso militar.

Coves aclaró que el proyecto de ley se ha redactado 'respetando' las competencias de los Ministerios de Defensa y Agricultura y Pesca. Alborán tiene un valor estratégico para Defensa por su ubicación. De hecho, hay una dotación militar que regresó a la isla después de varios años de ausencia. El destacamento permanente se había desmantelado cuando el Gobierno, ya en manos del PP, ordenó de nuevo que se restableciese la presencia militar en la isla. Por su parte, el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación declaró la zona como reserva marina en 1998 y, tres años después, reforzó la protección con la declaración de reserva integral de pesca.

Coral rojo

La actividad extractiva en el mar de Alborán es cada vez más intensa por la riqueza de sus caladeros, donde abundan especies como la gamba roja, la cigala o la merluza, lo que está poniendo en peligro su supervivencia, según la Consejería de Medio Ambiente. Una de las especies más atractivas para los pescadores -el coral rojo- está incluida en el Programa de Naciones Unidas para el Medio Ambiente como una de las que debe ser regulada. Según la Junta, la pesca de esta especie se realiza de forma 'irracional, a pesar de la erradicación de los métodos más impactantes, como la barra italiana'.

Entre las especies de más valor de los fondos marinos se encuentran algunas declaradas en peligro de extinción como la lapa gigante o la foca monje, y otras consideradas como vulnerables como el delfín mular, el coral naranja o la caracola del Mediterráneo. La riqueza de los fondos contrasta con la pobreza del suelo de la isla, donde no existen árboles ni arbustos debido, entre otros factores, a los fuertes vientos. Sin embargo se han desarrollado tres especies exclusivas (manzanilla, jaramago y azuzón de Alborán) y es el lugar de nidificación de la gaviota de Audouin, un ave única del Mediterráneo.

Con la protección de este enclave marítimo-terrestre, se elevarán a 128 los espacios naturales protegidos en Andalucía. El área de Alborán, declarada recientemente como Zona Especialmente Protegida de Importancia para el Mediterráneo, también ha sido propuesta para ser incluida en la Red Natura 2000 como Lugar de Interés Comunitario.