_
_
_
_
_
Crítica:Renault Espace IV
Crítica
Género de opinión que describe, elogia o censura, en todo o en parte, una obra cultural o de entretenimiento. Siempre debe escribirla un experto en la materia

Sofisticación y dinamismo con siete plazas

Marcos Baeza

Más ventajas y menos inconvenientes. El nuevo Renault Espace, la cuarta generación del monovolumen pionero en Europa, es una nueva evolución que potencia las virtudes de estos coches en amplitud, flexibilidad y confort. Y al mismo tiempo da un paso adelante para resolver sus aspectos menos conseguidos: manejabilidad en carretera y capacidad del maletero con las siete plazas ocupadas.

Pero aparte de mejorar sus valores como monovolumen, el familiar francés avanza también en calidad de conjunto y sofisticación técnica para posicionarse como un modelo de prestigio y referencia. Ahora tiene el equipo de seguridad más completo, la gama de motores más variada y potente y los dispositivos tecnológicos más llamativos. Y lo completa con una línea afilada y con mayor presencia, y una flexibilidad interior que mantiene el práctico sistema de raíles para los asientos y admite múltiples configuraciones: es el monovolumen más avanzado.

Competitivo y con dos carrocerías

El Espace IV representa la gran apuesta de Renault en la categoría. Con el nuevo modelo, la marca espera alcanzar el 20% de todas las ventas de este sector. Y la meta parece accesible porque en conjunto ofrece más que sus rivales (Chrysler Voyager, Citroën C8, Toyota Previa...) y con unos precios competitivos.

El nuevo Espace se pondrá a la venta el 15 de noviembre y mantendrá su oferta dual de carrocerías: Espace, con 4,6 metros de longitud, y Grand Espace, que sube a 4,8 metros, tiene más maletero e incluye siete butacas de serie. El Espace más barato se vende a partir de 26.100 euros (900 euros más con siete plazas). Y el Grand Espace, desde 31.200.

Como un tren de alta velocidad

Boletín

Las mejores recomendaciones para viajar, cada semana en tu bandeja de entrada
RECÍBELAS

El monovolumen francés evoluciona la estética del modelo anterior y se aleja del diseño rompedor de los últimos Renault (Megane, Vel Satis, Avantime...). Tiene una imagen potente y con personalidad, pero destaca sobre todo por su silueta, que recuerda a los trenes de alta velocidad. Esta impresión se refuerza además con la mecánica, que cuenta con los motores más potentes entre los monovolúmenes. Hay seis propulsores disponibles, tres de gasolina y tres turbodiésel. Entre los primeros, dos de cuatro cilindros (2.0 16v. de 140 CV y 2.0 turbo de 165 CV) y un poderoso 3.5 V6 de 245 CV que llegará el próximo enero. Y entre los turbodiésel, también dos de cuatro cilindros (1.9 y 2.2 dCi de 120 y 150 CV) y uno de seis, el 3.0 V6 dCi de 180 CV. Los dos V6 destacan por sus prestaciones (alcanzan 225 km/h.) y van unidos a cambios automáticos/secuenciales de cinco marchas. Y los motores de cuatro cilindros ofrecen un mejor consumo y vienen en origen con cambios manuales de seis marchas.

Sin embargo, en la mecánica sorprende ante todo el comportamiento dinámico. El Espace IV comparte el chasis del Vel Satis y consigue una manejabilidad por encima de la media, que combina precisión de guiado y agilidad en cualquier tipo de vía, desde autopistas hasta carreteras secundarias. Y logra superar una de las asignaturas pendientes de estos coches.

Cuatro acabados

Los equipamientos disponibles terminan de definir la superioridad de contenidos del nuevo Renault. Se ofrece con cuatro acabados: Authentique, Expression, Privilege e Initiale, pero todos resaltan por su equipo de seguridad y dispositivos tecnológicos. El control de estabilidad ESP, los seis airbags, un completo ABS, la tarjeta electrónica de apertura y arranque, el climatizador con dos zonas de regulación independiente y el freno de mano automático vienen de serie en toda la gama. Y hay muchas opciones y caprichos.

MOTOR: Renault Space IV
MOTOR: Renault Space IV

OCHO 'AIRBAGS' Y ARRANQUE SIN LLAVE

SEGURIDAD Y TECNOLOGÍA. Son los dos pilares en los que se apoya el nuevo Renault Espace y que marcan la diferencia con la competencia. La última generación del monovolumen grande francés recoge todos los avances de esta marca para convertirse en el modelo más completo y sofisticado.

Para empezar, es el monovolumen con el mejor equipo de seguridad. Incluye de serie control de estabilidad ESP, ABS y seis airbags (frontales, laterales delanteros y de cortina). Y se puede completar, como opción, con dos airbags más: laterales traseros y otros de cortina más largos que llegan a la tercera fila (300 euros cada uno). Además, el control de estabilidad aporta detalles innovadores, como una mejor eficacia al corregir los subvirajes (cuando el coche se va de delante), el aspecto menos logrado de este sistema. Y la carrocería tiene una capacidad 2,5 veces superior para absorber impactos sin dañar a los ocupantes.

Los elementos tecnológicos más destacados son el freno de mano automático, el control de presión de ruedas y la tarjeta de apertura (sustituye a la llave convencional). El primero y el último vienen de serie en toda la gama, y el control de presión de ruedas, opcional en los acabados bajos (Authentique y Expression), cuesta 300 euros, resulta útil y supone un plus en seguridad. Además, la tarjeta de apertura se ofrece en dos versiones según la terminación: una manual para la gama baja, que se introduce en una ranura para arrancar, y otra manos libres que no hace falta sacar del bolsillo y permite arrancar el motor pulsando un botón (variantes superiores). Además se ofrecen faros bi-xenón, faros y limpiaparabrisas automáticos, navegador...

FLEXIBILIDAD INTERIOR CON DISEÑO MINIMALISTA

AL IGUAL QUE LA CARROCERÍA, el interior del nuevo Espace evoluciona el diseño de su predecesor. Mantienen el mismo estilo tanto el salpicadero, una mezcla de minimalismo, limpieza y toque futurista, como la distribución de los mandos: instrumentación digital en el centro y los mandos del sistema de ventilación a la izquierda del volante.

Sin embargo, se han mejorado muchos aspectos, como la posición de conducción, que, salvo por la altura, es similar ahora a la de muchos turismos. También se ha ganado habitabilidad y confort a bordo. El aumento del tamaño exterior ha permitido ofrecer un interior aún más amplio y desahogado, con butacas más grandes, mayor luminosidad y más huecos para objetos.

Pero el interior sigue destacando ante todo por su flexibilidad, gracias al sistema de raíles de anclaje que recorre el suelo. Los asientos se desplazan en longitud, se pliegan y se sacan. Y hasta se pueden girar para crear un ambiente de salón, por ejemplo.

El nuevo Espace viene de serie con cinco butacas, y la carrocería larga Grand Espace incluye las siete.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Sobre la firma

Marcos Baeza
Redactor de Motor, especializado en producto y tecnología. Ha desarrollado toda su carrera en EL PAÍS, desde 1998, ligado siempre al automóvil. Sigue la actualidad del sector, prueba los nuevos modelos que llegan al mercado y analiza las tendencias y tecnologías asociadas, como la nueva movilidad eléctrica.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_