El supuesto asesino de Jessica y Holly es apto para ir a juicio

Ian Huntley no escapará a la justicia británica en relación con el rapto y asesinato de las niñas de 10 años Jessica Chapman y Holly Wells. El antiguo conserje de la escuela de ambas pequeñas fue declarado ayer capacitado mentalmente para atender las diligencias judiciales en su primera comparencia pública ante un magistrado. Inglés, de 28 años, Huntley está acusado del doble asesinato y de conspiración para 'pervertir el curso de la justicia'. Su novia, Maxine Carr, sigue en prisión preventiva a la espera de juicio por por tratar de encubrir al presunto responsable de la muerte de las niñas.

Huntley estaba retenido en una institución psiquiátrica de alta seguridad de Soham, su pueblo natal, desde su arresto y acusación formal, a los 15 días de la desaparición de Jessica y Holly, el pasado 4 de agosto. El deterioro de su salud mental en el transcurso de los interrogatorios policiales, que llevó a su ingreso en el psiquiátrico, levantó dudas sobre su capacidad para comprender la envergadura de un proceso judicial. Pero ayer, los médicos le dieron el alta en un informe presentado ante el juez, en cuyas conclusiones se descarta por completo que Huntley esté loco.

Tras una breve comparecencia, el acusado ingresó en prisión preventiva a la espera de juicio.